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Encuentran trazas de nicotina en agua embotellada producida en España

Investigadoras de la Universidad Rey Juan Carlos han hallado trazas de nicotina en agua mineral embotellada en España y advierten de la necesidad de realizar estudios sobre los posibles efectos en población vulnerable por su consumo crónico, así como del riego de contaminación de acuíferos. Un minucioso análisis de 58 componentes farmacéuticos en 10 marcas de agua embotellada, producidas en España –siete nacionales, una regional y dos locales– ha detectado nicotina en un rango de concentración de entre 7 y 15 ng/L, en cinco de las marcas estudiadas. Las botellas fueron compradas en supermercados ordinarios en Madrid y Toledo y enviadas al laboratorio en 24 horas. Esa cantidad de nicotina es muy pequeña para que existan efectos agudos inmediatos por el consumo. Sin embargo, no existen hasta el momento estudios sobre consumo crónico en población vulnerable (bebés, mujeres embarazadas), y consideramos que deberían realizarse para saber el riesgo real de dicha población, asevera la investigadora Silvia González, coautora del trabajo. La presencia de productos farmacéuticos en el agua potable no es novedosa, pero este es el primer estudio que analiza estos compuestos en agua mineral embotellada. Numerosos estudios realizados por Toxamb en cuencas españolas y por otros autores en todo el mundo demuestran que la nicotina es un compuesto muy resistente a los tratamientos de depuración habituales. En las estaciones depuradoras los tratamientos están dirigidos a la reducción o eliminación de contaminantes denominados prioritarios (nitratos, fosfatos, ácidos, etc.). Sin embargo, la efectividad de las tecnologías estándar de descontaminación de microcontaminantes como la nicotina, fármacos o drogas, llamados contaminantes emergentes, no han sido evaluadas hasta el momento. En los países de la UE ya se están incluyendo los contaminantes emergentes dentro de las normativas de monitorización, por lo que se espera que pronto se tengan en cuenta en la vigilancia ambiental y, por ende, se introduzcan nuevas tecnologías para eliminarlos.

RedacciónT21