Tendencias21

Un nuevo software permite imprimir férulas de muñeca en 3D para enfermos de artritis

La impresión 3D ha llegado para quedarse. De entre los usos que ya se le está dando destaca el sector de la ciencia y la medicina, con ámbitos como el de la odontología donde llevan décadas producción piezas de gran calidad y precisión, hasta otros como la industria de las prótesis, que han permitido ayudar a caminar o mover extremidades a personas que habían perdido esa capacidad, con modelos hechos a medida.

En este campo, un profesor de la Universidad de Loughborough, en el Reino Unido, ha desarrollado un prototipo de software que permitirá a médicos sin experiencia en Diseño Asistido por Ordenador (CAD) diseñar y hacer férulas de muñeca a medida para enfermos de artritis reumatoide. En un comunicado de la universidad, el doctor Abby Paterson, de la Escuela de Diseño, explica que “quería dar a los médicos la capacidad de hacer unas férulas que no habían sido capaces de hacer antes”.

La artritis reumatoide es una enfermedad que afecta aproximadamente al uno por ciento de la población, lo que supone que 250.000 personas la padecen en España. Se trata de una enfermedad incapacitante con la que los pacientes conviven a largo plazo, de ahí la importancia de aunar esfuerzos para incorporar mejoras en su calidad de vida, dar continuidad a una atención sanitaria de calidad y permitir el acceso a la innovación.

Con las férulas se pretende proporcionar protección, descanso, alivio del dolor y reducir la inflamación de las articulaciones, algo que aumentará con el nuevo modelo. “Se puede mejorar la estética, la forma e integrar características extra de funcionalidad que antes no se podía”, añade Paterson.

Escanear e imprimir

Arthritis Research UK realizó recientemente una encuesta de opinión sobre los modelos de férulas existentes, detectando que aunque el 90 por ciento de los pacientes afirmaron haberse beneficiado de una, también reconocieron que eran antiestéticas e incómodas. Este es precisamente uno de los principales escollos que pretende salvar el nuevo modelo, más cómodo y agradable estéticamente, además de potencialmente más barato que las opciones tradicionales.

Para su diseño se lleva a cabo en primer lugar un escaneo del brazo del paciente en la “posición correcta”. A partir de esa información digitalizada, el software 3D CAD genera el modelo tridimensional. La impresora puede entonces producir tantas férulas como sean necesarias, simplemente accionando un botón.

El profesor trabaja con el modelo Objet Connex de la compañía Stratasys, definida en su web como la primera impresora 3D en el mundo capaz de producir piezas mediante la combinación de múltiples colores y distintos tipos de materiales, una característica que promete acelerar radicalmente los procesos de diseño, ingeniería y fabricación industriales.

Esto permite integrar diferentes materiales en una misma férula, como bisagras que imitan el caucho u otros materiales que mejoran la amortiguación. Pueden ser de cualquier color, textura, nivel de fijación o diseño, destacando especialmente el modelo en forma de rejilla para favorecer la ventilación, eliminando así el problema del calor y sudor de las opciones tradicionales que lleva a muchos pacientes a no usarlas tan a menudo como deberían.

La seguridad que da la impresión tridimensional es que el producto final será tal como fue proyectado por el diseñador, fabricante o creativo, en este caso el propio médico que adapte el modelo a las necesidades del enfermo.

Mejoras

El prototipo de software 3D CAD se ha puesto a prueba ante profesionales del sector, así como terapeutas ocupacionales y fisioterapeutas que trabajan con paciente de artritis reumatoide. Al respecto, Paterson asegura que “estaban muy emocionados por las nuevas ideas para ampliar las posibilidades a su alcance, como los bordes de caucho integrados para una mayor comodidad”.

Sin embargo, Paterson todavía considera necesario seguir mejorando tanto el software como los materiales. En ello trabaja junto a Richard Bibb, el investigador que ha supervisado su estudio durante el doctorado, y precisamente a quien se le ocurrió la idea de crear férulas de muñeca a medida en la década de los 90.

Bibb y Paterson están actualmente analizando los costos que supondría la prestación del servicio. Bibb afirma que las férulas 3D podrían ser más baratas que las actuales, al separar las fases de diseño y fabricación. Así, entiende que será rentable para el Servicio Nacional de Salud (NHS) del Reino Unido) SNS, mientras el "cielo es el límite" en el sector privado.

“Estamos en fase de desarrollo. La investigación ha demostrado su potencial y los médicos lo quieren”, destaca Bibb. Tanto Paterson como Bibb estiman que con un poco de respaldo financiero podrían perfeccionar el software en 18 meses.