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La física cuántica recupera los registros de los discos de vinilo

Investigadores del Lawrence Berkeley National Laboratory (Berkeley Lab han conseguido recuperar con toda nitidez los registros de antiguos discos de vinilo, lo que puede constituir toda una revolución para un mercado de miles de millones de copias que se consideraba en fase de extinción.

La tecnología consiste en capturar la imagen de los surcos de los discos de vinilo utilizando una técnica de análisis óptico inventada para enviar partículas subatómicas a un acelerador.

La imagen de este relieve, capturada a través de un impacto luminoso ultrasensible, se transmite a continuación a un ordenador, que es el que recrea el sonido y borra las impurezas, ya que el programa informático que lo rige es capaz de eliminar las ralladuras del disco.

De esta forma, los investigadores han podido obtener versiones digitales de gran calidad de registros musicales de los años cuarenta y cincuenta, sin los clásicos sonidos que distorsionan la calidad de la interpretación.

Tecnología inofensiva

Esta tecnología tiene la ventaja de que no daña en absoluto el disco de vinilo, contrariamente a lo que ocurre cuando es sometido a un lector tradicional, que recorre los surcos con una punta de diamante, ya que el análisis óptico no toca en ningún momento la superficie del vinilo.

También permite esta tecnología recuperar los registros de los discos de vinilo que estén rotos, ya que el ordenador puede reconstruir la continuidad del registro musical obviando la fractura del soporte físico.

La tecnología permitirá recuperar, en un formato digital mucho más seguro y prolongado, los registros de vinilo archivados en bibliotecas y fonotecas particulares, permitiendo a los amantes de la música disfrutar de interpretaciones antiguas que ya estaban desahuciadas a medio plazo.

Del acelerador al vinilo

La tecnología empleada para recuperar para la historia los registros de vinilo se utiliza desde hace diez años para detectar unas partículas subatómicas llamabas bosones y enviarlas al gran acelerador norteamericano, el Atlas.

Para la construcción de este acelerador fue preciso desarrollar un sistema óptico ultra preciso que permitiera alinear los detectores de silicio destinados a dirigir las partículas subatómicas detectadas hacia el Atlas.

Con algunas modificaciones, el instrumento se ha recuperado para visualizar, utilizando el mismo procedimiento, los microsurcos de los discos de vinilo. El análisis óptico se envía a continuación a una platina virtual donde los algoritmos específicos que fueron creados para eliminar el ruido de fondo creado por las partículas subatómicas en el acelerador, borran las impurezas acumuladas en el vinilo.

Los internautas pueden juzgar los resultados de esta técnica a través de los diferentes clips de audio depositados en la red por los investigadores y compararlos con el sonido tradicional.