Tendencias21

Nueva aplicación permite escanear precios con el móvil

La empresa Modiv Media ha creado recientemente un dispositivo para los iPhone que permite a las personas que van a hacer la compra escanear ellos mismos los alimentos y recibir ofertas, para no tener que esperar la cola que en ocasiones se acumula en las cajas para pagar.

Según informa la compañía en un comunicado, la tecnología de la cámara del iPhone convierte al teléfono en un escáner de código de barras muy efectivo. Una de las principales consecuencias de esto es que se reduce el costo del sistema por tienda de 80.000 a sólo 7.000 dólares, al haber menos probabilidades de robos en el establecimiento y menos gastos, y al no ser necesarios tantos empleados.

El funcionamiento de la aplicación es el siguiente: la cámara del teléfono captura los códigos de barras de los artículos que la persona pone en un carro de la compra y agrega sus precios para un total acumulado. Mientras, se van guardando los productos directamente en las bolsas para así evitar el tener nuevamente que cargarlas y descargarlas en la caja registradora.

Cuando el usuario ha terminado de comprar, la aplicación envía información sobre el contenido de la cesta de la compra al punto de venta principal de la tienda, en el que se escanea su tarjeta bancaria y se paga.

Cada vez que el sistema envía a los clientes una oferta pertinente, el iPhone ofrece un sonido a modo de campana. Estas ofertas están basadas en los hábitos de compras de los clientes. El sistema utiliza también la tecnología de localización para determinar cuando un cliente se encuentra en la tienda (por ejemplo, el pasillo de los alimentos congelados) y enviar así la oferta más relevante de esa zona en la que el comprador se encuentra.

Este servicio se ofrecerá en breve también en los teléfonos Android, pero trasladarlo a la BlackBerry será problemático, debido a la escasa calidad de la cámara de estos dispositivos.

Supermercados Stop&Sop

De momento, Madov Media sólo ofrece este sistema en los supermercados Stop&Stop, de Nueva Inglaterra. Hasta ahora, según informa la propia compañía, todos los involucrados en el proceso han salido ganando.

Los encargados del supermercado están contentos porque los clientes que utilizan este sistema gastan, de media, un 10% más por visita al comercio. Además, Stop & Shop también obtiene un 30 por ciento de beneficio por cada impresión.

Las marcas, por su parte, están satisfechas con este sistema porque pueden ofrecer ofertas muy concretas a tiempo real. En cuanto a los clientes, están a gusto con esta nueva aplicación porque reciben ofertas especiales y porque no tienen que esperar colas en la caja.

El bajo coste que ha supuesto habilitar las tiendas con el dispositivo del iPhone debería, a juicio de la compañía Modiv Media, ayudarles a expandir el sistema a otros minoristas, como grandes cadenas de supermercados o tiendas como Walmart y Target. Y es que el sistema funciona mejor para las tiendas donde los clientes compran frecuentemente grandes cantidades.

El vicepresidente de Modiv Media, John Caron, en declaraciones recogidas por la web technologyreview, señala que: “Modiv siempre ha intentado poner en marcha un dispositivo de compras de teléfonos inteligentes, pero hasta hace poco los teléfonos no habían sido capaces de capturar los códigos de barras con suficiente claridad”.

No obstante, añade: “Modiv introdujo en una primera instancia teléfonos en las tiendas con los que los clientes podían examinar los productos; y ahora que las cámaras de los teléfonos han mejorado la compañía ha sido capaz de lanzar su aplicación”.

Demanda creciente

Europa representa una gran oportunidad para la compañía, ya que varias tiendas de comestibles, incluyendo Germany ‘s Feneberg y las cadenas de Metro AG, ofrecen también un servicio personalizado.

Sin embargo, se espera que la implantación de esta aplicación sea muy lenta en Estados Unidos , debido a la acumulación de nuevos proyectos de Tecnología de la Información (TI) adoptados allí por las cadenas de supermercados y otros grandes minoristas.

Actualmente, el iPhone sólo constituye alrededor del 10% de los teléfonos móviles en servicio, por lo que los clientes seguirán utilizando el escáner habitual o esperarán hasta que el sistema pueda utilizar un teléfono inteligente Android u otro sistema operativo basado en esta tecnología.