La región macaronésica es reconocida internacionalmente por su alto valor ecológico y por la biodiversidad que aporta al planeta, desde sus mares hasta sus más altas cumbres. Y entre los archipiélagos que la forman, Canarias sobresale especialmente. Pero la intervención del hombre en el medio ha causado graves daños en su entorno, sobre todo en forma de deforestaciones agresivas o reforestaciones que no se orientaron a la recuperación del medio, sino a la explotación maderera. Hay constancia de que ya las poblaciones prehispánicas —los guanches— explotaban el entorno de manera intensiva, con lo que causaron algunos daños irreversibles como la extinción, ya en aquella época, de especies autóctonas. Con la conquista de las islas y el crecimiento de su población, el uso de los bosques del archipiélago se intensificó y la situación se agravó hasta extremos de catástrofe medioambiental. En los años 50 del pasado siglo, se iniciaron campañas de reforestación que, más que la recuperación del entorno, pretendían proteger el suelo frente a la erosión, mejorar el ciclo hidrológico y satisfacer la demanda de madera local e, incluso, crear una industria de exportación. Para esto último, se utilizaron especies foráneas de crecimiento rápido que generaban una productividad mayor. En las últimas décadas, las administraciones públicas locales han corregido esta situación con sucesivas campañas orientadas a recuperar los bosques originales, pero la actual crisis y los recortes presupuestarios han supuesto un enorme obstáculo. En este contexto nace un proyecto empresarial que pretende ofrecer herramientas que permitan generar una huella positiva en el planeta apoyando proyectos como este; para ello, busca la colaboración de todas las personas que se sientan identificadas con esa visión del mundo. La compañía propone un modelo basado en los actuales y exitosos sistemas de , es decir, que busca financiación para los proyectos de recuperación medioambiental a través de la participación de muchas personas. El primer proyecto puesto en marcha, , trata de paliar el problema descrito más arriba. Objetivo: 50.000 euros. En la web de Mirlo Positive Nature se encuentra toda la información del proyecto: inversión necesaria y modalidades de participación (que van desde el Certificado de Contribución natural hasta los variados paquetes Positive Nature), pensadas para que dejar una huella positiva en el planeta.
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