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La NASA estrellará una nave con un asteroide para desviarlo de su órbita

Una nave espacial lanzada por la NASA el próximo año impactará contra un asteroide con el propósito de desviarlo de su órbita: el objetivo es probar esta técnica de defensa en caso de que sea necesario utilizarla frente a un objeto realmente peligroso que se acerque a la Tierra. La nave DART se lanzará el 23 de noviembre de 2022, junto a un cohete SpaceX Falcon 9.

La nave colisionará con el asteroide a unos 10,8 millones de kilómetros de la Tierra entre el 26 de septiembre y el 1 de octubre de 2022. El asteroide objetivo, Dimorphos, que significa «dos formas» en griego, tiene unos 160 metros de diámetro y orbita alrededor de un asteroide más grande llamado Didymos.

Según un artículo publicado en Phys.org, aunque no hay un asteroide conocido actualmente que esté en curso directo de impacto contra nuestro planeta, los científicos saben que existe una gran población de asteroides cercanos a la Tierra que pueden llegar a ser potencialmente peligrosos.

Desviar sin impactar

En ese marco, la prueba de redireccionamiento de doble asteroide (DART) buscará determinar si la desviación de este tipo de cuerpos es una forma efectiva para evitar el impacto de un asteroide, si es que alguno de ellos amenaza a la Tierra en un futuro. Los especialistas creen que la clave para la defensa planetaria es hallar una metodología que funcione y haya sido probada antes de la llegada de un peligro real.

Aunque ni Dimorphos ni Didymos son considerados asteroides que podrían representar una amenaza para el planeta, son candidatos ideales para este “experimento” gracias a la posibilidad de observarlos a través de telescopios terrestres. Al mismo tiempo, las imágenes de la prueba serán recolectadas por un satélite, equipado con una cámara en miniatura. El satélite es un aporte de la Agencia Espacial Italiana: será expulsado por la nave DART exactamente 10 días antes de la colisión con el asteroide.

Como el asteroide Dimorphos completa una órbita alrededor de su compañero Didymos cada 11 horas y 55 minutos con una exactitud de relojería suiza, el impacto debe ser igualmente preciso para que la prueba arroje resultados fiables. Los especialistas de la NASA remarcaron que la nave solo dará un “leve empujón” al asteroide, no se tratará de una colisión que pueda generar múltiples fragmentos.

El sutil impacto provocará una desviación de alrededor del 1% en la trayectoria orbital del asteroide, que sería suficiente para evitar su hipotético choque contra la Tierra. Dimorphos tiene una edad aproximada de unos 4.500 millones de años, en tanto que su composición está dominada por una mezcla de grano fino de roca y metal.

Tema relacionado: La defensa planetaria contra los asteroides peligrosos pasa a la ofensiva.

Sin alarmas, pero siempre atentos

Gracias a esta prueba, los investigadores lograrán determinar la fuerza exacta requerida en un impacto de este tipo, que haga posible desviar el curso del asteroide pero no producir su estallido y fragmentación. Una colisión destructora podría ser igual o más perjudicial que un impacto directo contra nuestro planeta.

Hasta el momento se han catalogado más de 27.000 asteroides cercanos a la Tierra, pero por ahora ninguno es un peligro real. Por ejemplo, el gigantesco asteroide Bennu, que con sus 500 metros de ancho es uno de los cuerpos más “temidos” por los especialistas en defensa planetaria, pasará en 2135 a la mitad de la distancia que existe entre la Tierra y la Luna.

Más allá de estos datos que tranquilizan, los expertos no descuidan ningún detalle: ese es el motivo de una prueba como DART. Los científicos saben que un mínimo cambio no advertido en la trayectoria de un asteroide cercano puede llegar a ser el inicio de una catástrofe de proporciones bíblicas.

Foto: recreación artística del impacto entre el asteroide y la nave espacial. Crédito: NASA.