Tendencias21
Los aviones del futuro batirán sus alas como los pájaros

Los aviones del futuro batirán sus alas como los pájaros

Gracias al efecto combinado de los nuevos materiales y del uso de la informática, el avión del futuro imitará cada vez más el vuelo de los pájaros. Utilizará alas aéreo elásticas que se tensarán como los músculos y se juntarán en vuelo, al mismo tiempo que su ancho y longitud podrán variar hasta un 50%, toda una revolución en la ingeniería aeroespacial. Por Raúl Morales.

The planes of the future are created to be like Birds. Thanks to the effective combination of new materials and the use of the information, the plane of the future imitates the flight of a bird. They are going to utilize the aero-elastics that work like the muscles, together in flights, at the same time the arch and longitude are able to vary until 50%, a revolution in aerospace engineering. By: Raúl Morales.

Los aviones del futuro batirán sus alas como los pájaros

Según informa la revista Science News, técnicos norteamericanos han conseguido fabricar un caza supersónico experimental que es controlado por el suave batir de sus alas. Una demostración de estas habilidades tendrá lugar este verano con un F/A-18 modificado.

Las alas de este aparato experimental son muy finas y, aunque conservan los clásicos alerones para las movimientos del avión, estos alerones desempeñan sólo una función secundaria, ya que lo que hacen es desencadenar los correspondientes movimientos de las alas.

Las finas alas de este prototipo pesan quince veces menos que un ala convencional y su uso como superficie de control del avión permite obtener una eficacia mayor que la que facilitan los alerones tradicionales.

La pasada primavera, investigadores de la Nasa, del laboratorio de investigación del ejército del aire (AFRL y del departamento de investigaciones avanzadas de Boeing, procedieron a ensayos preliminares de este prototipo con la finalidad de medir los parámetros físicos que se aplican a las alas en diferentes condiciones de vuelo.

Alas musculares

Pero las investigaciones no se limitan sólo a la consecución de alas flexibles, ya que científicos e ingenieros de diferentes empresas que trabajan para el Pentágono pretenden asimismo modificar la forma de la superficie de las alas, al igual que ocurre con los músculos, que se tensan y distienden al mismo tiempo que aumenta y disminuye su grosor.

La empresa Skunk Works, una división de Lockheed Martin, de Palmdale, en California, pretende asimismo fabricar aviones con pequeñas alas que sustituyan a las tradicionales de tal forma que, adheridas al fuselaje, puedan plegarse y aproximarse entre sí, tal como hacen las aves.

NextGen Aeronautics, por su parte, trabaja en un ala metamórfica que pretende sustituir el ala convencional de los aviones de combate por una mucho más estrecha más favorable a la velocidad, mientras que Raytheon Missile Systems, de Tucson, perfila un ala telescópica adaptada a las necesidades de un misil de crucero.

El objetivo que persiguen todas estas investigaciones es crear antes del año próximo un conjunto de maquetas de alas funcionales capaces de reducir a la mitad su longitud y grosor, por lo que la tecnología aerodinámica se aproxima a lo que fueron los primeros pasos de la aviación, las alas flexibles de los hermanos Wright, que por razones de seguridad fueron sustituidas a comienzos del siglo XX por estructuras rígidas combinadas con alerones.

La creciente capacidad de los ordenadores y la elasticidad y peso de los nuevos materiales, permiten cien años más tarde pensar de nuevo en aviones que imitan el vuelo de los pájaros, aunque todavía queden unas décadas para que esta tecnología, si realmente confirma su validez, traspase la frontera de los vehículos militares y se extienda a la aviación civil.

Hacer un comentario

RSS Lo último de Tendencias21

  • El misterio del ordenador más antiguo del mundo 16 noviembre, 2024
    En 1901, un grupo de investigadores descubrió en un naufragio un extraño y rudimentario ordenador, que luego se definió como el mecanismo de Antikythera, un artefacto fechado en el siglo II a.C. que se convirtió en el ordenador más antiguo del mundo y hasta apareció en uno de los films de la saga "Indiana Jones". […]
    Pablo Javier Piacente
  • Piedras de 12.000 años de antigüedad serían la evidencia más antigua del principio mecánico de la rueda 15 noviembre, 2024
    Aunque los arqueólogos ubican la invención formal de la rueda sobre la Edad del Bronce, un nuevo estudio sugiere que este avance podría haberse concretado miles de años antes: el análisis de un conjunto excepcional de más de cien guijarros perforados, descubietos en una aldea de Israel, muestra que estas piedras con 12.000 años de […]
    Pablo Javier Piacente
  • Restauran la visión humana mediante células madre 15 noviembre, 2024
    En un avance vital en el campo de la medicina regenerativa, un trasplante de células madre ha mejorado significativamente la visión de tres personas con daños severos en sus córneas. El ensayo clínico realizado en Japón es el primero en su tipo a nivel mundial, según destacan los investigadores.
    Pablo Javier Piacente
  • La cultura declara también la emergencia climática: así es el movimiento 15 noviembre, 2024
    La cultura mundial se suma al movimiento por la emergencia climática y en España acaba de lanzarse con un manifiesto entre la utopía y la distopía para desafiar las estructuras de poder que ignoran el consenso científico, fracasan en su misión de protegernos y perpetúan el ecocidio.
    Alejandro Sacristán (enviado especial)
  • Crean un arma de rayo de energía inspirada en la Estrella de la Muerte de la saga Star Wars 14 noviembre, 2024
    Científicos chinos afirman haber hecho realidad el arma de haz de energía convergente que utiliza la estación espacial Estrella de la Muerte en la saga Star Wars: el sistema dirige una serie de haces de alta potencia a un solo objetivo. En la práctica, el arma podría tener un impacto letal al permitir desplegar múltiples vehículos […]
    Pablo Javier Piacente
  • Una isla rusa desaparece por completo del mapa en el Ártico 14 noviembre, 2024
    Un grupo de escolares y estudiantes universitarios descubrió que una isla rusa en el Ártico ha desaparecido recientemente, después de comparar imágenes satelitales del área para un proyecto educativo. La Sociedad Geográfica Rusa confirmó la desaparición de la isla helada Mesyatseva, aparentemente como consecuencia de los efectos del calentamiento global y el cambio climático antropogénico.
    Pablo Javier Piacente
  • Descubren cómo nuestro cerebro predice el futuro 14 noviembre, 2024
    El cerebro hace mucho más que procesar información: aprende de experiencias pasadas y hace predicciones sobre el futuro inmediato. Así podemos vivir con seguridad las experiencias cotidianas.
    Redacción T21
  • Descubren una extraña criatura fantasmal desconocida en lo profundo del océano 13 noviembre, 2024
    Un grupo de investigadores ha revelado recientemente una variedad desconocida de nudibranquio, una extraña criatura marina que nada libremente en los mares a más de 2.200 metros de profundidad, iluminada por un brillo bioluminiscente y adornada con una capucha ondulante, que le confieren un aspecto fantasmal. Se trata del primer nudibranquio conocido de su tipo, […]
    Pablo Javier Piacente
  • Nuestros antepasados usaron herramientas hace más de 3 millones de años 13 noviembre, 2024
    Un nuevo estudio que ha analizado los huesos de las manos de australopitecos, simios y humanos revela que el uso de herramientas probablemente evolucionó antes del surgimiento del género Homo: nuestros antepasados homínidos habrían comenzado a dominarlas hace más de 3 millones de años, iniciando una práctica cultural y tecnológica que se creía propia de […]
    Pablo Javier Piacente
  • Es hora de reconstruir una Valencia que sea física, política y económicamente resiliente 13 noviembre, 2024
    La tragedia de Valencia es la suma de la crisis climática y de una gobernanza que ha priorizado el lucro de unos pocos y el crecimiento descontrolado por encima de la seguridad de las personas. Una financiación autonómica injusta y una insuficiente comprensión de los riesgos climáticos que la ciencia anuncia completan una catástrofe anunciada.
    Fernando Valladares, Agnès Delage Amat y Rafael Jiménez Aybar (*)