Tendencias21
Pará, la nueva tierra en donde crece la palma

Pará, la nueva tierra en donde crece la palma

Los caminos casi no tienen horizontes. El verde de las plantaciones de palma africana se sucede monocorde sobre kilómetros y kilómetros de tierras rojas, devastadas en el pasado por madereros y ganaderos. Señal de alerta para unos y de esperanza para otros, el “dendê”, como llaman en Brasil a la palma africana Elaeis guineensis, llegó […]

El artículo Pará, la nueva tierra en donde crece la palma fue publicado originalmente en IPS Agencia de Noticias.

Las palmas africanas crecen en este predio amazónico entreveradas con otra vegetación. Crédito: Fabiana Frayssinet/IPS

Las palmas africanas crecen en este predio amazónico entreveradas con otra vegetación. Crédito: Fabiana Frayssinet/IPS

Por Fabiana Frayssinet
MOJÚ/TOMÉ-AÇU, Brasil, Nov 11 2013 (IPS)

Los caminos casi no tienen horizontes. El verde de las plantaciones de palma africana se sucede monocorde sobre kilómetros y kilómetros de tierras rojas, devastadas en el pasado por madereros y ganaderos.

Señal de alerta para unos y de esperanza para otros, el “dendê”, como llaman en Brasil a la palma africana Elaeis guineensis, llegó para quedarse al estado amazónico de Pará, en el extremo norte de este país.

La ruta que parte de Belém, la capital estadual, no tiene la hondura ni la exuberancia de la selva amazónica.

Al embotellamiento de tránsito de la capital lo suceden más de 150 kilómetros de caminos de asfalto y tierra, definidos por una línea de plantaciones de palma, apenas salpicados de pequeños poblados y de cabezas de ganado.

Según el Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales, la Amazonia brasileña perdió 111.087 kilómetros cuadrados de cobertura forestal entre 2004 y 2012. En el mismo lapso, la deforestación en Pará fue de 44.361 kilómetros cuadrados.

En esta tierra rapada por la ganadería, se instaló hace 27 años la empresa Agropalma, que vende el aceite a las industrias de alimentos, higiene y cosmética, y que posee en Pará más de 39.000 hectáreas de dendê.

Últimamente la siguieron otras, interesadas en el biodiésel: Belém Bioenergia (BB), empresa de riesgo compartido entre la estatal Petrobras y la privada portuguesa Galp Energia, y Biopalma, unidad de la corporación minera brasileña Vale.
Raticidas en plantaciones de dendê

IPS tuvo acceso a denuncias investigadas por el Ministerio Público de Pará sobre el supuesto uso de raticidas prohibidos en plantaciones de dendê.

Los plantadores emplearían Klerat –autorizado solo para empresas acreditadas y en ambientes urbanos— para combatir roedores silvestres.

El Klerat es un potente anticoagulante que causa hemorragias internas. Si una persona se alimenta de esos animales que se cazan en la Amazonia, también podría sufrir sus efectos.

“Es un proyecto económicamente sustentable, ambientalmente correcto y socialmente enriquecedor”, dijo a IPS el director agroindustrial de BB, Antônio Gonçalves Esmeraldo.

Según el ejecutivo, BB escoge sus tierras con base en un mapeo agroecológico de la estatal Empresa Brasileña de Investigaciones Agropecuarias (Embrapa), que indica zonas deforestadas y degradadas por la pecuaria.

El dendê emplea a 10.914 personas en este estado de casi ocho millones de habitantes.

Una finca arrendada por BB de 8.500 hectáreas que, cuando se dedicaba a la ganadería empleaba a cinco personas, con el dendê dará trabajo a unos 850 lugareños, dijo Esmeraldo.

La empresa prevé cubrir 60.000 hectáreas para 2015, de las cuales ya plantó la mitad; 6.000 corresponden a 600 agricultores familiares que le venderán su producción y el resto a tierras arrendadas a hacendados.

Biopalma, por su parte, obtendrá aceite de 60.000 hectáreas propias y de la cosecha de otras 20.000, a cargo de 2.000 pequeños productores.

El objetivo es biodiésel para mezclarlo en una proporción de 20 por ciento con el gasóleo que mueve la maquinaria minera y las locomotoras de Vale, explicó a IPS el director de bioenergía de la firma, César Abreu.

Según Melquíades Santos Filho, gerente de comunicación de Biopalma, el dendê equilibra tierras degradadas, al integrarse a la flora nativa. La empresa asegura que en las plantaciones comenzaron a reaparecer especies casi extintas, como el jaguar.

En 2012, la palma ocupaba en Pará 140.000 hectáreas, y su producción se destinaba en 67 por ciento a alimentos y cosmética y en 33 por ciento a agrocombustibles, según un estudio del ingeniero agrónomo D’Alembert Jaccoud.

El sector privado proyecta extender esa superficie a 329.000 hectáreas para 2015 y ampliar hasta 47 por ciento la porción destinada a biodiésel, dijo Jaccoud a IPS.

Y el gobierno de Pará cree que, para 2022, las plantaciones de palma para biodiésel ocuparán 700.000 hectáreas

El Programa de Producción Sostenible de Aceite de Palma determina qué áreas degradadas son aptas para esta siembra. Según la estatal Embrapa, hay disponibles unas 10,4 millones de hectáreas.

Primera parte de procesamiento de fruto de la palma, en Biopalma, municipio de Mojú, estado de Pará. Crédito: Fabiana Frayssinet/IPS

Primera parte de procesamiento de fruto de la palma, en Biopalma, municipio de Mojú, estado de Pará. Crédito: Fabiana Frayssinet/IPS

Con esa expansión, Brasil pasaría a ser el tercer productor mundial de aceite de palma, detrás de Indonesia y Malasia, de acuerdo al gobierno de Pará.

Pero el temor es que este país siga el rumbo de Indonesia o Malasia, que hoy abastecen 86 por ciento del mercado mundial gracias a una intensa destrucción forestal y a incendios y nubes de humo que afectan incluso el resto de Asia sudoriental.

Después de África, donde “la inseguridad jurídica” da pie al acaparamiento de tierras de empresas chinas y europeas, “la otra gran frontera es la Amazonia sudamericana” y en ella Brasil tiene “el mayor stock de tierras”, señaló Jaccoud.

El Programa Nacional de Producción de Biodiésel incentiva esta plantación. Por ley, los vehículos a gasóleo deben emplear una mezcla de cinco por ciento de biodiésel y el propósito es llegar a siete por ciento. Será un “mercado cautivo obligatorio”, anticipó Jaccoud.

El Ministerio de Desarrollo Agrario apuesta a este combustible que se obtiene de soja, girasol, ricino, canola y dendê, entre otras especies vegetales.

El biodiésel libera menos gases de efecto invernadero que los combustibles fósiles y su producción contribuye a diversificar la matriz energética.

El gobierno también espera reducir la importación de gasóleo y, promoviendo la producción de palma desde la pequeña agricultura, generar ingresos, empleos y estímulos a las economías locales.

Para Jaccoud, los programas oficiales tienen buenas intenciones, pero no existe todavía un control adecuado.

Hay peligro de que la propiedad de la tierra se concentre más, aumente el consumo de pesticidas y, por la migración de trabajadores rurales, las zonas urbanas se vuelvan más precarias y violentas.

A Guilherme Carvalho, educador del programa no gubernamental FASE Amazônia, le preocupa que las empresas estén intentando “forzar a la agricultura familiar a invertir en ese monocultivo” y abandonar los alimentos, lo que crearía “inseguridad alimentaria, pérdida de autonomía de sus tierras y dependencia de los precios de mercado”, dijo.

En los contratos que firman Biopalma y BB con los pequeños agricultores se establece que solo empleen 10 hectáreas de sus predios para el dendê, y el resto queda libre para alimentos y especies tradicionales.

Pero la agricultura familiar representa por ahora una parte pequeña de las plantaciones de palma.

João Meirelles, director del Instituto Peabirú, rescata la palma como “un intento del regreso a la selva” en áreas tropicales, preferible a la soja y al ganado.

Pero apela a la “responsabilidad social” de las empresas para que no recreen “los mismos vicios” de la caña de azúcar, concentrada en pocas manos y con una cultura precaria de trabajadores rurales migrantes.

El director de Biopalma, Márcio Maia, desestimó la concentración de la propiedad.

En la región amazónica hay grandes irregularidades en la titulación de tierras y eso “lleva al alejamiento de importantes jugadores que tienen interés en invertir en este cultivo”, aseguró.

Artículos relacionados

El artículo Pará, la nueva tierra en donde crece la palma fue publicado originalmente en IPS Agencia de Noticias.

Fuente : http://www.ipsnoticias.net/2013/11/para-la-nueva-t…

RedacciónT21

Hacer un comentario

RSS Lo último de Tendencias21

  • Revelan la primera molécula fractal en la naturaleza 15 abril, 2024
    Los científicos han descubierto una molécula en la naturaleza que sigue un patrón geométrico de autosimilitud, conocido como fractal. La enzima microbiana denominada citrato sintasa es la primera estructura fractal molecular ensamblada directamente en la naturaleza que ha logrado identificarse hasta el momento. Los especialistas creen que este fractal puede representar un accidente evolutivo.
    Pablo Javier Piacente
  • El cambio climático podría estar relacionado con el aumento de los accidentes cerebrovasculares 15 abril, 2024
    Una nueva investigación ha demostrado que el número de muertes ligadas a accidentes cerebrovasculares y otras patologías relacionadas ha ido creciendo desde 1990, a la par del aumento de las temperaturas extremas. Durante 2019, el último año analizado, más de 500.000 muertes por accidentes cerebrovasculares se vincularon con temperaturas "no óptimas", provocadas por el calentamiento […]
    Pablo Javier Piacente
  • La globalización está fracturando a la humanidad 15 abril, 2024
    La globalización no está conduciendo a una civilización universal con valores compartidos, sino que está creando una brecha creciente entre los países occidentales de altos ingresos y el resto del mundo, en cuanto a valores como la tolerancia, la diversidad y la libertad.
    Eduardo Martínez de la Fe
  • En el caso de los caracoles, el huevo fue lo primero 14 abril, 2024
    Un caracol marino que primero fue ovíparo y evolucionó hacia la viviparidad revela que los saltos evolutivos ocurren gradualmente, a través de una serie de pequeños cambios.
    Redacción T21
  • Revelan el misterio del árbol tropical que camina 13 abril, 2024
    La denominada "palma caminante" o Socratea exorrhiza es un árbol de América Central y del Sur que según distintas versiones podría "caminar" y erguirse en determinadas situaciones: ahora, este mito parece haber sido resuelto bajo criterios científicos. Según los investigadores, aunque el árbol puede crecer rápidamente y crear nuevas raíces para lidiar con la pérdida […]
    Pablo Javier Piacente
  • Descubren 50 especies desconocidas para la ciencia en la exótica Isla de Pascua 12 abril, 2024
    Una expedición a la Cordillera de Salas y Gómez, frente a Rapa Nui, en el Océano Pacífico, documentó 160 especies animales que no se sabía que habitaban esta región de la misteriosa Isla de Pascua, en Chile. Además, descubrieron 50 criaturas que son absolutamente nuevas para la ciencia.
    Pablo Javier Piacente
  • El clima espacial podría generar un caos satelital sin precedentes 12 abril, 2024
    Los satélites en órbita terrestre baja (LEO) pueden perder su brújula cuando el clima espacial ofrece situaciones inesperadas. El problema afecta a la Estación Espacial Internacional, la estación espacial Tiangong de China y muchos satélites de observación de la Tierra. Los expertos sostienen que esta incertidumbre de posicionamiento aumenta el riesgo de colisiones orbitales peligrosas, […]
    Pablo Javier Piacente
  • La Inteligencia Artificial puede ser envenenada para proteger los derechos de autor 12 abril, 2024
    Una herramienta llamada Nightshade cambia imágenes digitales de manera casi imperceptible para el ojo humano, pero que se ven totalmente diferentes por los modelos de IA: una forma polémica de proteger las obras de arte de posibles infracciones de derechos de autor.
    Redacción T21
  • La acidez cerebral podría estar relacionada con múltiples trastornos neurológicos 11 abril, 2024
    Un estudio en animales a gran escala vincula los cambios en el pH del cerebro con problemas cognitivos de amplio alcance, ligados a patologías como el autismo o el Alzheimer, entre otras. Los científicos creen que los problemas metabólicos en el cerebro podrían estar directamente relacionados con una variedad de trastornos neuropsiquiátricos y neurodegenerativos.
    Pablo Javier Piacente
  • Cultivan organoides cerebrales con conexiones neuronales similares a las de un cerebro real 11 abril, 2024
    Un equipo internacional de investigadores ha desarrollado una técnica para conectar tejidos cultivados en laboratorio que imitan al cerebro humano de una manera que se asemeja a los circuitos neuronales del cerebro real. El "sistema" de mini cerebros interconectados podría revolucionar nuestra comprensión de las funciones cerebrales.
    Pablo Javier Piacente