Mutación capitalista

Le Monde Diplomatique (LMD) analiza en su edición de octubre el auge de la economía colaborativa, que según el rotativo francés desvela “el anhelo de una sociedad exasperada por los estragos del capitalismo salvaje”.

LMD destaca que, a nivel planetario, la economía colaborativa crece entre el 15% y el 17% al año y que su éxito plantea un desafío abierto a las empresas tradicionales porque la economía evoluciona hacia un nuevo modelo que estimula la colaboración y el intercambio. Todo esto plantea una verdadera revolución en el seno del capitalismo que está operando una nueva mutación, considera LMD.

Jeremy Rifkin, en un reciente libro,  profundiza en las implicaciones de estos nuevos fenómenos. Considera que la conjunción de las nuevas tecnologías y de la economía colaborativa supondrá el eclipse del capitalismo tal como lo conocemos en la actualidad.

Aunque esta visión no deja de ser una previsible evolución de los acontecimientos, tal como hace la prospectiva, la realidad es que no sólo existe la economía colaborativa, sino también toda una constelación de economías paralelas (economía verde, economía azul, economía del bien común) que profundizan en nuevos modelos de producción e intercambio basados en una filosofía  muy diferente a la que hasta ahora ha regido el pensamiento económico imperante.

Todo este sector de las nuevas economías tiene una cita mundial en Málaga en abril próximo, con la idea de  intercambiar propuestas e información para crear vínculos de cooperación entre organizaciones de todo el mundo. Puede que las nuevas economías estén alcanzando un nuevo nivel en su desarrollo e implantación social que confirme la pretendida mutación capitalista.