Tendencias21
Los códigos genéticos e informáticos comparten sorprendentes similitudes

Los códigos genéticos e informáticos comparten sorprendentes similitudes

La teoría de la «supervivencia del más apto» de Darwin puede aplicarse tanto a los sistemas biológicos como a los sistemas informáticos, sugiere una investigación del BNL y de la la Stony Brook University de Nueva York. El análisis del genoma de 500 bacterias y de 200.000 paquetes Linux ha revelado que estas dos redes complejas utilizan el mismo mecanismo para expandir sus componentes clave. La razón de esta similitud estaría en que las dos son sistemas de acceso libre, afirman los científicos.

Los códigos genéticos e informáticos comparten sorprendentes similitudes

La teoría de la «supervivencia del más apto» de Charles Darwin se refería originalmente a la selección natural de los sistemas biológicos, pero una nueva investigación del Brookhaven National Laboratory (BNL) y de científicos de la Stony Brook University de Nueva York ha demostrado que esta teoría también puede aplicarse a sistemas tecnológicos .

El biólogo computacional Sergei Maslov, miembro del personal de investigación del BNL y de la Stony Brook University, trabajó con Yau Pang, estudiante del Departamento de física y astronomía de dicha Universidad, para comparar la frecuencia de supervivencia de los componentes de dos sistemas complejos aparentemente muy distintos: el genoma bacteriano y los sistemas operativos Linux. Su trabajo ha sido publicado en Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS) este mes de abril.

El misterio de la necesidad

Maslov y su colaborador se propusieron analizar porqué algunos genes especializados o programas informáticos concretos son muy comunes mientras que otros son una excepción, con el fin de determinar cuántos de los componentes de estos sistemas resultan tan importantes como para no poder ser eliminados.

Maslow explica en un comunicado de la Stony Brook que si un genoma bacteriano no tiene un gen particular, morirá. ¿Cuántos de sus genes son hasta tal punto necesarios?

Lo mismo ocurre con los sistemas de software. Estos tienen diversos componentes, pero requieren sobre todo de aquellos que trabajan en conjunción con otros de manera adecuada para prosperar.

Utilizando datos de secuenciación masiva de genomas bacterianos, los científicos examinaron la frecuencia de aparición de genes específicos en el genoma de quinientas especies de bacterias.

De este modo, descubrieron una sorprendente similitud con la frecuencia de instalación de 200.000 paquetes Linux (programas empaquetados para su instalación) en más de dos millones de ordenadores.

Linux es un software de colaboración de código abierto que permite a los diseñadores modificar su código fuente para crear programas para uso público.

Selección universal

Los componentes utilizados con mayor frecuencia, tanto en los sistemas biológicos como en los ordenadores, son aquellos que aceptan la mayoría de las generaciones subsiguientes.

Es decir, cuanto más sea necesario un elemento para otros, mayor será la probabilidad de que dicho elemento resulte preciso para la funcionalidad completa de un sistema. Puede parecer lógico, pero lo sorprendente de este descubrimiento es su universalidad.

«Es casi esperable que la frecuencia de uso de cualquier componente esté relacionada con la cantidad de componentes que dependen de él. Pero hemos descubierto que podemos determinar el número de componentes cruciales – aquellos sin los que otros elementos no podrían funcionar- mediante un simple cálculo que resulta válido tanto para los sistemas biológicos como para los sistemas informáticos», explican los científicos.

Tanto en el caso de las bacterias como el de los sistemas computacionales, si se hace la raíz cuadrada de los componentes interdependientes se puede hallar el número de componentes tan esenciales que ningún otro elemento podría sobrevivir sin ellos, señala Maslow.

Los códigos genéticos e informáticos comparten sorprendentes similitudes

La ecuación es válida solo en libertad

El cálculo puede aplicarse igualmente a ambas redes complejas porque las dos son ejemplos de sistemas de acceso libre, y cuentan con componentes que se instalan de forma independiente.

«Las bacterias son como los BitTorrents de la biología», afirma el científico haciendo referencia a un popular protocolo para el intercambio de archivos extensos a través de Internet.

Estos minúsculos organismos “tienen un gigantesco fondo común de genes que comparten libremente entre ellas. Los sistemas bacterianos pueden añadir o eliminar genes de su genoma a través de lo que se conoce como transferencia genética horizontal, un proceso que les permite intercambiar ‘archivos’ fácilmente «, explica Maslov.

Lo mismo ocurre con los sistemas operativos Linux, que permiten la instalación gratuita de los componentes creados, para que estos sean compartidos por multitud de diseñadores independientes.

En cambio este cálculo no sería válido para, por ejemplo, un sistema operativo Windows, que solo ejecuta programas propietarios. Tal vez por eso, en noviembre de 2007, Linux era el sistema operativo del 85% de las supercomputadoras más poderosas, comparado con el 1,2% de Windows; y en febrero de 2008, cinco de las diez empresas más confiables proveedoras de internet usaban Linux, mientras que solo dos usaban Windows.

Los defensores del software libre afirman que la fuerza clave de Linux es que respeta lo que ellos consideran son las libertades esenciales de los usuarios: la libertad de moverlo, estudiarlo y cambiarlo, así como de redistribuir copias. La genética de las bacterias podría estar dándoles la razón.

Referencia bibliográfica:

T. Y. Pang, S. Maslov. Universal distribution of component frequencies in biological and technological systems. Proceedings of the National Academy of Sciences (2013). DOI: 10.1073/pnas.1217795110.

RedacciónT21

Hacer un comentario

RSS Lo último de Tendencias21

  • Revelan la primera molécula fractal en la naturaleza 15 abril, 2024
    Los científicos han descubierto una molécula en la naturaleza que sigue un patrón geométrico de autosimilitud, conocido como fractal. La enzima microbiana denominada citrato sintasa es la primera estructura fractal molecular ensamblada directamente en la naturaleza que ha logrado identificarse hasta el momento. Los especialistas creen que este fractal puede representar un accidente evolutivo.
    Pablo Javier Piacente
  • El cambio climático podría estar relacionado con el aumento de los accidentes cerebrovasculares 15 abril, 2024
    Una nueva investigación ha demostrado que el número de muertes ligadas a accidentes cerebrovasculares y otras patologías relacionadas ha ido creciendo desde 1990, a la par del aumento de las temperaturas extremas. Durante 2019, el último año analizado, más de 500.000 muertes por accidentes cerebrovasculares se vincularon con temperaturas "no óptimas", provocadas por el calentamiento […]
    Pablo Javier Piacente
  • La globalización está fracturando a la humanidad 15 abril, 2024
    La globalización no está conduciendo a una civilización universal con valores compartidos, sino que está creando una brecha creciente entre los países occidentales de altos ingresos y el resto del mundo, en cuanto a valores como la tolerancia, la diversidad y la libertad.
    Eduardo Martínez de la Fe
  • En el caso de los caracoles, el huevo fue lo primero 14 abril, 2024
    Un caracol marino que primero fue ovíparo y evolucionó hacia la viviparidad revela que los saltos evolutivos ocurren gradualmente, a través de una serie de pequeños cambios.
    Redacción T21
  • Revelan el misterio del árbol tropical que camina 13 abril, 2024
    La denominada "palma caminante" o Socratea exorrhiza es un árbol de América Central y del Sur que según distintas versiones podría "caminar" y erguirse en determinadas situaciones: ahora, este mito parece haber sido resuelto bajo criterios científicos. Según los investigadores, aunque el árbol puede crecer rápidamente y crear nuevas raíces para lidiar con la pérdida […]
    Pablo Javier Piacente
  • Descubren 50 especies desconocidas para la ciencia en la exótica Isla de Pascua 12 abril, 2024
    Una expedición a la Cordillera de Salas y Gómez, frente a Rapa Nui, en el Océano Pacífico, documentó 160 especies animales que no se sabía que habitaban esta región de la misteriosa Isla de Pascua, en Chile. Además, descubrieron 50 criaturas que son absolutamente nuevas para la ciencia.
    Pablo Javier Piacente
  • El clima espacial podría generar un caos satelital sin precedentes 12 abril, 2024
    Los satélites en órbita terrestre baja (LEO) pueden perder su brújula cuando el clima espacial ofrece situaciones inesperadas. El problema afecta a la Estación Espacial Internacional, la estación espacial Tiangong de China y muchos satélites de observación de la Tierra. Los expertos sostienen que esta incertidumbre de posicionamiento aumenta el riesgo de colisiones orbitales peligrosas, […]
    Pablo Javier Piacente
  • La Inteligencia Artificial puede ser envenenada para proteger los derechos de autor 12 abril, 2024
    Una herramienta llamada Nightshade cambia imágenes digitales de manera casi imperceptible para el ojo humano, pero que se ven totalmente diferentes por los modelos de IA: una forma polémica de proteger las obras de arte de posibles infracciones de derechos de autor.
    Redacción T21
  • La acidez cerebral podría estar relacionada con múltiples trastornos neurológicos 11 abril, 2024
    Un estudio en animales a gran escala vincula los cambios en el pH del cerebro con problemas cognitivos de amplio alcance, ligados a patologías como el autismo o el Alzheimer, entre otras. Los científicos creen que los problemas metabólicos en el cerebro podrían estar directamente relacionados con una variedad de trastornos neuropsiquiátricos y neurodegenerativos.
    Pablo Javier Piacente
  • Cultivan organoides cerebrales con conexiones neuronales similares a las de un cerebro real 11 abril, 2024
    Un equipo internacional de investigadores ha desarrollado una técnica para conectar tejidos cultivados en laboratorio que imitan al cerebro humano de una manera que se asemeja a los circuitos neuronales del cerebro real. El "sistema" de mini cerebros interconectados podría revolucionar nuestra comprensión de las funciones cerebrales.
    Pablo Javier Piacente