Tendencias21
La NASA identifica cinco fenómenos sobrenaturales en el espacio

La NASA identifica cinco fenómenos sobrenaturales en el espacio

La NASA ha identificado cinco fenómenos sobrenaturales que suceden casi exclusivamente en el espacio exterior: desafían a la comprensión humana y obligan a los astrónomos a encontrar nuevas explicaciones.

El espacio está dominado por fuerzas electromagnéticas invisibles que normalmente no sentimos. También está repleto de extraños tipos de materia que nunca experimentamos en la Tierra. El Centro de Vuelo Espacial Goddard de la NASA ha identificado cinco fenómenos sobrenaturales que ocurren únicamente en el espacio, y que obligan a los científicos a ampliar su comprensión para poder entenderlos en profundidad.

Los misterios del cosmos nos cautivan desde siempre, pero al mismo tiempo la ciencia y la tecnología, y especialmente la astronomía, han avanzado tanto en los últimos siglos que han logrado explicar y demostrar muchos de los enigmas que años atrás parecían imposibles de descifrar. Sin embargo, ciertos fenómenos aún continúan desafiando nuestro entendimiento y provocan nuevos esfuerzos para que el conocimiento científico amplíe sus límites.

Un artículo publicado en el sitio web del Centro de Vuelo Espacial Goddard de la NASA describe cinco cuestiones que podrían considerarse como “sobrenaturales” en nuestro planeta, ya que no tendrían una explicación racional en nuestro contexto, pero que en el espacio suceden con cierta asiduidad. ¿Cuáles son esos fenómenos y cómo trabaja la ciencia para poder comprenderlos?

El plasma y las temperaturas extremas

Uno de esos misterios es el plasma. En la Tierra, la materia asume uno de tres estados: sólido, líquido o gaseoso. En el espacio, sin embargo, el 99,9% de la materia normal se encuentra en una forma completamente distinta, denominada plasma. Se trata de una sustancia compuesta por iones y electrones sueltos: todas las estrellas, incluido el Sol, están hechas principalmente de plasma. En la Tierra, aparece ocasionalmente en forma de rayos y en signos de neón.

Su comportamiento es asombroso, ya que interactúa con campos magnéticos invisibles que logran controlar los movimientos de las partículas cargadas en el plasma y crear ondas que aceleran dichas partículas a velocidades inmensas.

El segundo fenómeno son las temperaturas extremas en el espacio: si la Tierra experimenta un amplio rango de temperaturas, aquello que consideramos extremo en nuestro planeta es el promedio en el espacio. En planetas sin una atmósfera aislante, las temperaturas fluctúan de forma dramática entre el día y la noche. Mercurio, por ejemplo, vive días con temperaturas que llegan a los 449 grados Celsius y noches gélidas que alcanzan los 171 grados Celsius bajo cero.

En tanto, cuando la sonda solar Parker de la NASA concrete su aproximación más cercana al Sol, experimentará diferencias térmicas de más de 2.000 grados.

Tema relacionado: Misterio en torno a los destellos de luz más extremos del universo.

Fusión, enormes explosiones y ondas de choque

Otro gran misterio cósmico es la fusión: se trata del proceso en el cual los elementos ligeros se “exprimen” bajo una inmensa presión y temperatura, convirtiéndose en nuevos elementos más pesados. En sus momentos iniciales, el universo contenía principalmente hidrógeno y helio, además de una pequeña porción de un par de otros elementos ligeros.

Desde ese momento, la fusión en estrellas y supernovas han proporcionado al cosmos más de 80 elementos nuevos, algunos de los cuales hacen posible la vida. El Sol, por ejemplo, fusiona alrededor de 600 millones de toneladas métricas de hidrógeno por segundo.

El cuarto fenómeno identificado por la NASA son las enormes explosiones que ocurren en el espacio a cada momento, en el área cercana a la Tierra. Cuando el viento solar, la corriente de partículas cargadas del Sol, colisiona contra el “escudo magnético” que protege a la Tierra, denominado magnetosfera, se generan eventos explosivos que provocan, por ejemplo, las auroras que embellecen los cielos de nuestro planeta. Estas interacciones magnéticas “explosivas” ocurren en todo el espacio y son objeto de proyectos como la misión Magnetospheric Multiscale de la NASA.

Por último, los astrónomos también intentan explicar el fenómeno conocido como ondas de choque. En el espacio exterior, las partículas pueden transferir energía sin necesidad de tocarse. Esta extraña transferencia energética tiene lugar en estructuras invisibles conocidas como “choques”. El contenido energético se transfiere a través de ondas de plasma, campos eléctricos y magnéticos.

Las ondas de choque pueden formarse solamente cuando las cosas se mueven a velocidades supersónicas, o sea más rápido que la velocidad del sonido. Un escenario posible es alrededor de supernovas activas que expulsan nubes de plasma. Sin embargo, en casos muy extraños estos “choques” pueden crearse súbitamente en la Tierra, por ejemplo cuando los aviones viajan más rápido que la velocidad del sonido.

¿Tendrá la ciencia algún día una comprensión real y profunda de estos extraños fenómenos? Por el momento, nos continuarán asombrando e indicando que existen fuerzas y realidades que nos exceden.

Foto: enormes explosiones invisibles ocurren constantemente en el espacio, incluso alrededor de la Tierra. Estas explosiones son el resultado de líneas de campo magnético retorcidas que se rompen y realinean, disparando partículas a través del cosmos. Créditos: Centro de Vuelo Espacial Goddard de la NASA/CILab.

Video: los campos eléctricos y magnéticos pueden agregar y eliminar energía de las partículas, cambiando sus velocidades. Crédito: NASA/Goddard Space Flight Center Scientific Visualization Studio/YouTube.

Pablo Javier Piacente

Pablo Javier Piacente es periodista especializado en comunicación científica y tecnológica.

Hacer un comentario

RSS Lo último de Tendencias21

  • Las ranas les guiñan el ojo a los machos elegidos para el apareamiento 17 marzo, 2024
    Un curioso estudio ha descubierto que las ranas les guiñan el ojo al macho para indicarle que le gusta. En respuesta al parpadeo, el macho lanza repetidamente un grito entrecortado y salta junto a ella para aparearse.
    N+1/T21
  • Los perros son nuestros terapeutas de cuatro patas 16 marzo, 2024
    Investigadores de Corea del Sur colocaron auriculares con electrodos a 30 adultos y luego midieron los cambios en sus ondas cerebrales mientras interactuaban con un caniche llamado Aro. Los resultados indicaron que pasear al perro hizo que los participantes se sintieran más relajados, cepillarle mejoró la concentración y jugar con la mascota produjo ambos efectos.
    Redacción T21
  • Revelado el “piercing” del Neolítico 15 marzo, 2024
    Los arqueólogos han descubierto una colección de artefactos decorativos con forma de tachuelas, que podrían utilizarse en las modernas perforaciones de labios. Identificados en las tumbas de un asentamiento neolítico en el sureste de Turquía, representan los primeros ejemplos convincentes de perforaciones corporales voluntarias, como las que se realizan en la actualidad para la práctica […]
    Pablo Javier Piacente
  • Es urgente limitar a la IA para evitar el apocalipsis de nuestra civilización 15 marzo, 2024
    Un nuevo informe elaborado por la firma Gladstone por pedido del Departamento de Estado de los Estados Unidos advierte que la rápida evolución de la Inteligencia Artificial (IA) podría representar un riesgo "catastrófico" para la seguridad nacional e incluso para toda la humanidad. El documento sugiere que el gobierno estadounidense debe actuar "rápidamente y con […]
    Pablo Javier Piacente
  • La fibra óptica inteligente se despliega por el fondo del mar 15 marzo, 2024
    Una nueva fibra óptica asistida por IA se está desplegando en el fondo del mar no solo para la transmisión de datos, sino también para alertar en tiempo récord de tsunamis o terremotos y para monitorizar el calentamiento de los océanos.
    Eduardo Martínez de la Fe
  • Una extraña formación rocosa en África esconde en sus entrañas la evidencia de los terremotos más antiguos de la Tierra 14 marzo, 2024
    Las grandes cantidades de ceniza volcánica encontradas en el cinturón de piedras verdes de Barberton, en África, pueden ser un registro antiguo de violencia volcánica similar a la que puede observarse actualmente en la Tierra, según un nuevo estudio. Además de demostrar que en los inicios de nuestro planeta los terremotos estuvieron más presentes de […]
    Pablo Javier Piacente
  • La sabiduría ancestral de las mujeres reduce el impacto climático 14 marzo, 2024
    Las mujeres no solo son víctimas de la sequía, sino que pueden ser agentes de cambio con conocimientos y habilidades únicas para adaptarse y atenuar su impacto: aplican una técnica estadística moderna para localizar el agua desde mucho antes de su elaboración científica. Son más necesarias que nunca en tiempos de crisis climática.
    Alicia Domínguez y Eduardo Costas (*)
  • El entrelazamiento cuántico “se hereda de padres a hijos” 14 marzo, 2024
    El entrelazamiento cuántico se prolonga entre las partículas secundarias que se desprenden de los cimientos de la materia, un descubrimiento que abre nuevas expectativas para la física nuclear y para la computación clásica inspirada en la cuántica.
    Eduardo Martínez de la Fe
  • Un sensor diseñado para observar el cosmos profundo revela el corazón de un átomo 14 marzo, 2024
    Un grupo de científicos empleó un instrumento diseñado originalmente para estudiar enormes objetos celestes en el cosmos para investigar el mundo en una escala mucho más pequeña: con este instrumento, denominado cámara Compton, lograron sondear el corazón de un átomo. Los especialistas creen que los hallazgos podrían facilitar una comprensión más profunda de los principios […]
    Pablo Javier Piacente
  • Una danza cósmica entre Marte y la Tierra impacta en nuestros océanos cada 2,4 millones de años 13 marzo, 2024
    Un nuevo análisis del registro geológico de las profundidades marinas concluye que la interacción gravitacional entre Marte y la Tierra da como resultado cambios cíclicos en las corrientes oceánicas profundas, que se repiten cada 2,4 millones de años. El hallazgo ayudará a los científicos a comprender y predecir mejor el clima de la Tierra en […]
    Pablo Javier Piacente