Los agujeros negros no solo emiten radiación, sino también presión sobre el entorno que procedería de la gravedad cuántica oculta en su interior. Hemos descubierto el posible escondite del santo grial de la Nueva Física.
Los agujeros negros no solo emiten radiación, sino también presión sobre el entorno que procedería de la gravedad cuántica oculta en su interior. Hemos descubierto el posible escondite del santo grial de la Nueva Física.