Nuevos análisis de los vapores que emanan de la superficie de Encélado confirman que el océano subterráneo de la luna más fría de Saturno es capaz de sustentar una rica comunidad microbiana.
Nuevos análisis de los vapores que emanan de la superficie de Encélado confirman que el océano subterráneo de la luna más fría de Saturno es capaz de sustentar una rica comunidad microbiana.