Tendencias21
La electricidad ayuda a las telarañas a capturar presas y partículas contaminantes

La electricidad ayuda a las telarañas a capturar presas y partículas contaminantes

El pegamento de las telas de araña conduce la electricidad, han descubierto científicos de la Universidad de Oxford. Este hecho hace que sea “atraído” hacia las partículas o insectos que javascript:void(0)se mueven por el aire, y que van cargados de electricidad estática. La eficiencia de las telarañas para captar sustancias volátiles podría ser aprovechada para controlar la contaminación del aire, de manera tan eficiente como los sensores industriales, pero más barata y natural, afirman los investigadores.

La electricidad ayuda a las telarañas a capturar presas y partículas contaminantes

Las telas de araña “cazan” activamente a sus presas gracias a la propagación, a través de sus superficies, de un pegamento poco común porque, además de pegar, conduce la electricidad, han descubierto unos científicos de la Universidad de Oxford, en el Reino Unido.

Los investigadores encontraron que las propiedades electrostáticas del pegamento que recubre las telarañas permiten que éstas atrapen todas las partículas con carga eléctrica -desde polen a sustancias contaminantes e insectos voladores-.

También demostraron que las espirales de pegamento de estas redes pueden distorsionar el campo eléctrico de la Tierra unos pocos milímetros alrededor de la red, lo que permitiría a los insectos detectar la ‘trampa’ con sus antenas, antes de caer en ella.

El estudio, publicado en la revista Naturwissenschaften, revela como un capricho de la física puede hacer que las telas de araña se muevan hacia todos los objetos transportados por el aire, estén éstos cargados positiva o negativamente. Esto explica por qué estas redes son capaces de recoger pequeñas partículas del aire de manera tan eficiente, y por qué se acercan a los insectos.

Telas de araña para controlar la contaminación

Según los investigadores, las telas de araña comunes, presentes en todo el mundo, podrían por tanto usarse para la vigilancia del medio ambiente, ya que filtran activamente contaminantes del aire con una eficacia comparable a la de los sensores industriales más costosos.

“La elegante física de estas redes las convierte en filtros activos, perfectos para la captación de contaminantes presentes en el aire, como los aerosoles y los pesticidas, explica Fritz Vollrath, director del estudio, en un comunicado de dicha Universidad.

«La atracción eléctrica arrastra las partículas hacia las telas de araña, por lo que éstas se podrían reunir para controlar los niveles de contaminación, por ejemplo, para comprobar si hay pesticidas dañando a las poblaciones de abejas”.

“Una posibilidad aún más fascinante sería usarlas para detectar algunas sustancias químicas del aire con sólo observar las redes. Muchas arañas se comen sus propias telarañas con el propósito de reciclar y reutilizar su seda. En ésta quedan por tanto las partículas y las sustancias químicas, dibujando eléctricamente la telaraña. Ya sabemos que las arañas tejen telas diferentes en función de lo que hayan consumido, por ejemplo pueden crear hermosas telas de con LSD y terribles telarañas con cafeína. Por tanto, las formas de las telas de araña por sí solas pueden indicarnos si alguna sustancia química presente en el aire está afectando el comportamiento del animal”, asegura Vollrath.

Alerta eléctrica para los insectos

En colaboración con Donald Edmonds, del Departamento de Física de la Universidad de Oxford, el investigador también ha demostrado que ciertas telarañas, como las de la araña de jardín o araña de la cruz (Araneus diadematus),‎ causan distorsiones locales en el campo eléctrico de la Tierra, porque se comportan como discos conductores.

Muchos insectos son capaces de detectar pequeñas alteraciones eléctricas, entre ellos las abejas, capaces de notar los campos eléctricos de diferentes flores o de otras abejas.

«Casi todos los insectos voladores son capaces de detectar perturbaciones eléctricas gracias a que sus antenas funcionan como sensores, cuando sus extremos están conectados al cuerpo por materiales aislantes, lo que supone que la carga de dichos extremos será diferente a la del resto del insecto”, sigue explicando Vollrath.

“Cuando esos insectos se acercan a objetos cargados, las puntas de sus antenas se mueven un poco, un movimiento que ellos pueden sentir. Las abejas usan este sistema para detectar flores, por lo que queda por ver si también pueden usarlo para esquivar las telas de araña y evitar convertirse en alimento”.

Aunque las perturbaciones eléctricas causadas por las telas de araña son de muy de corto alcance y aún no está claro si los insectos son capaces de detectarlas antes de quedar atrapados, es evidente que las cargas electrostáticas juegan un papel importante en el mundo de los insectos.

«La gente a menudo subestima la electricidad estática que se acumula en los objetos transportados por el aire, pero es importante a todas las escalas”. Por ejemplo, «el desastre del Hindenburg (un dirigible alemán tipo zeppelin, destruido a causa de un incendio cuando aterrizaba en Nueva Jersey el 6 de mayo de 1937) podría haber sido causado por una descarga de electricidad estática, y se sabe de helicópteros que han explotado por esta misma causa. Todo lo que se mueve a través del aire desarrolla carga estática, por lo que es fascinante ver como las telarañas aprovechan este hecho para atrapar activamente a las presas. Es una gran ventaja para nosotros que funcionen así, porque esto también las hace atraer contaminantes, lo que las convierte en una forma barata y natural de controlar pesticidas y la calidad del aire en todo el mundo”, concluye el investigador.

Referencia bibliográfica:

Fritz Vollrath, Donald Edmonds. Consequences of electrical conductivity in an orb spider’s capture web. Naturwissenschaften (2013). DOI: 10.1007/s00114-013-1120-8.

RedacciónT21

Hacer un comentario

RSS Lo último de Tendencias21

  • Detectan extraños pulsos de radio procedentes de un magnetar que desconciertan a los científicos 10 abril, 2024
    Los astrónomos han detectado señales de radio inusuales procedentes de XTE J1810-197, un radiomagnetar o estrella de neutrones ultramagnética situada a 8.100 años luz de distancia de la Tierra, en la constelación de Sagitario. Los resultados son inesperados y sin precedentes: a diferencia de las señales de radio que se han detectado en otros magnetares, […]
    Pablo Javier Piacente
  • La IA podría ser el límite para todas las civilizaciones avanzadas en el Universo 10 abril, 2024
    Un nuevo estudio sugiere que el desarrollo de la Inteligencia Artificial (IA) hacia una Superinteligencia Artificial (ASI) podría explicar por qué no hemos detectado aún otras civilizaciones avanzadas en el cosmos, a pesar de la alta probabilidad de su existencia: en vez de supernovas, plagas, guerras nucleares o eventos climáticos extremos que hayan sido un […]
    Pablo Javier Piacente
  • Higgs ha podido dejar abierta la puerta a la Nueva Física 10 abril, 2024
    La muerte de Peter Higgs, que pasará a la historia como el descubridor del bosón que explica cómo se forma la materia, deja un legado en la historia de la física que todavía puede aportar algo más trascendente: la prueba definitiva de una Nueva Física más allá del Modelo Estándar.
    Eduardo Martínez de la Fe
  • Descubren neuronas "zombis" en el cerebro, que serían claves en el proceso de aprendizaje 9 abril, 2024
    Las neuronas "zombis" son unidades vivas pero funcionalmente alteradas, que parecen "dormidas" en determinadas situaciones: los investigadores han revelado que cumplen un papel fundamental en el cerebelo, concretamente en aspectos relativos a la forma en la cual aprendemos.
    Pablo Javier Piacente
  • La Luna se invirtió por completo hace más de 4 mil millones de años 9 abril, 2024
    Hace unos 4.220 millones de años, poco después de que la Luna se formara a partir de un trozo de la Tierra que se desprendió durante una colisión violenta a principios de la historia del Sistema Solar, nuestro satélite se dio vuelta y comenzó así una etapa clave de su desarrollo. Así lo ha comprobado […]
    Pablo Javier Piacente
  • Arte rupestre de hace 2.000 años podría representar música psicodélica 9 abril, 2024
    Aunque la música psicodélica moderna no nació hasta la década de 1960, las influencias psicodélicas se pueden encontrar en el arte rupestre de hace miles de años. Grabados precolombinos en piedra, de 2.000 años de antigüedad, reflejan figuras humanas bailando en estado de trance chamánico.
    Redacción T21
  • Descubren antiguas partículas de polvo espacial provenientes de otro sistema estelar 8 abril, 2024
    Los astrónomos han descubierto una rara partícula de polvo atrapada en un antiguo meteorito extraterrestre, que fue formado por una estrella distinta a nuestro Sol. El polvo se habría originado luego de una supernova: las partículas son como "cápsulas del tiempo celestes" y proporcionan una instantánea de la vida de su estrella madre.
    Pablo Javier Piacente
  • Un lejano mundo deja ver una increíble explosión de luz en sus cielos "metálicos" 8 abril, 2024
    Utilizando datos del Telescopio Espacial CHEOPS de la Agencia Espacial Europea (ESA), cuyo centro de operaciones científicas se localiza en la Universidad de Ginebra, en Suiza, un equipo internacional de científicos logró detectar por primera vez un extraño fenómeno lumínico denominado “gloria” en un exoplaneta: el estallido de luz se apreció en WASP-76b, un mundo […]
    Pablo Javier Piacente
  • El ordenador cuántico desembarca en el mundo universitario 8 abril, 2024
    La última computadora cuántica System One de IBM se ha instalado en el Instituto Politécnico Rensselaer (RPI) en Nueva York. Es la primera máquina cuántica de IBM instalada en un campus universitario de Estados Unidos. Una revolución en el mundo académico que impulsa la formación de un ecosistema cuántico global.
    Eduardo Martínez de la Fe
  • Los cocodrilos imitan a las ballenas antes de aparearse 7 abril, 2024
    Los cocodrilos cortejan a las hembras lanzando un chorro de agua al aire, tal como hacen las ballenas cuando salen a la superficie. A ellas les encantan también los silbidos y las burbujas que les dedican sus parejas antes de aparearse. Se está elaborando un diccionario de cocodrilos.
    Redacción T21