Hace diez mil millones de años, dos estrellas de neutrones chocaron entre sí y emitieron un resplandor diez mil billones de veces más brillante que nuestro Sol.
Desde entonces, el resplandor de esa colisión, una breve explosión de rayos gamma (SGRB), ha viajado a través del universo a la velocidad de la luz.
El resplandor que vieron los astrónomos probablemente duró solo unas pocas horas. Luego pasó 10 mil millones de años viajando hacia nosotros para terminar tropezando con los espejos de los telescopios en la Tierra.
La más antigua
El Observatorio Orbital Neil Gehrels Swift de la NASA fue el primero en detectarlo, seguido por el telescopio Gemini de Hawai y luego por otros instrumentos astronómicos situados en Arizona y Chile, según explican en un artículo publicado en The Astrophysical Journal Letters.
La explosión registrada ahora en la Tierra, conocida como SGRB181123B, ocurrió cuando el universo estaba en su adolescencia, 3.800 millones de años después del Big Bang. Se ha convertido en la explosión de rayos gamma más antigua jamás detectada.
La aparición temprana de estas explosiones SGRB en la historia del universo puede cambiar la teoría sobre su origen, especialmente el tiempo que tardan dos estrellas de neutrones en fusionarse para producir estos poderosos eventos, destacan los astrónomos.
Cuando se produjo el SGRB181123B, el universo estaba increíblemente ocupado, con estrellas que se formaban rápidamente y galaxias de rápido crecimiento. Las estrellas binarias masivas necesitan tiempo para nacer, evolucionar y morir, convirtiéndose finalmente en un par de estrellas de neutrones que finalmente se fusionan.
La luz más energética
Las explosiones de rayos gamma (GRB) son explosiones de luz de rayos gamma de corta duración, la forma de luz más energética. Con una duración de unos pocos milisegundos a varios minutos, los GRB brillan cientos de veces más que una supernova típica y alrededor de un millón de billones de veces más que el Sol.
Cuando un GRB entra en erupción, es por poco tiempo la fuente más brillante de fotones cósmicos de rayos gamma en el Universo observable, destaca la NASA.
Los SGRB que se pueden posicionar con precisión son escasos: por lo general solo se detectan de 7 a 8 cada año. Este es el SGRB más fiable y distante con detección óptica de brillo posterior, destacan los astrónomos.
La punta del iceberg
“Ciertamente, no esperábamos descubrir un SGRB distante, ya que son extremadamente raros y muy débiles», explica Wen-fai Fong de Northwestern, autora principal del estudio, en un comunicado.
«Realizamos análisis forense con telescopios para comprender su entorno local, porque el aspecto de su galaxia puede decirnos mucho sobre la física subyacente de estos sistemas», añade.
«Creemos que estamos descubriendo la punta del iceberg en términos de SGRB distantes», señala Kerry Paterson, primer autor del estudio. «Eso nos motiva a seguir estudiando eventos pasados y examinar intensamente los futuros».
Referencia
Discovery of the optical afterglow and host galaxy of short GRB181123B at z=1.754: Implications for Delay Time Distributions. K. Paterson et al. Astrophysical Journal Letters , 2020.
No será el resplandor del Big Bang ?