Tendencias21

Programan células ‘conscientes’ del orden en que pasan las cosas

Ingenieros de MIT han conseguido programar células que responden a estímulos según el orden en que se producen. El sistema podría aplicarse para estudiar enfermedades en las que el orden en que suceden ciertos eventos es importante.

Programan células 'conscientes' del orden en que pasan las cosas

La biología sintética permite a los investigadores programar células para realizar funciones novedosas como emitir fluorescencia en respuesta a una sustancia química en particular o producir medicamentos en respuesta a marcadores de enfermedades.

En un paso hacia la elaboración de circuitos celulares mucho más complejos, ingenieros de MIT (Massachusetts Institute of Technology, Boston, EE.UU.) han programado células para recordar y dar respuesta a una serie de acontecimientos.

Estas células pueden recordar, en el orden correcto, hasta tres instrucciones diferentes, pero este enfoque debe ser escalable para incorporar muchos más estímulos, dicen los investigadores. Usando este sistema, los científicos pueden realizar un seguimiento de eventos celulares que ocurren en un orden particular, crear sensores ambientales que almacenen historias complejas, o programar trayectorias celulares.

«Se pueden construir sistemas informáticos muy complejos si se integra el elemento de memoria con el cálculo», dice Timothy Lu, profesor asociado de ingeniería eléctrica y ciencias de la computación y de ingeniería biológica, y jefe del Grupo de Biología Sintética del Laboratorio de Investigación de Electrónica de MIT, en MIT News.

Este enfoque permite a los científicos crear «máquinas de estado» biológicas: dispositivos que existen en diferentes estados dependiendo de las órdenes que reciben. Los investigadores también crearon un software que ayuda a los usuarios a diseñar circuitos que implementan máquinas de estado con diferentes comportamientos, que luego pueden ser probados en las células.

Lu es el autor principal del estudio, que aparece en Science. Nathaniel Roquet, estudiante de posgrado de MIT y Harvard, es el autor principal del artículo.

En 2013, Lu y sus colegas diseñaron circuitos celulares que pudieran desempeñar una función lógica y luego almacenar una memoria del evento mediante codificación en su ADN.

Los circuitos de la máquina de estado que diseñan en el nuevo artículo se basan en enzimas llamadas recombinasas. Cuando son activadas por una información específica, tal como una señal química, las recombinasas eliminan o invierten un tramo particular de ADN, dependiendo de la orientación de dos secuencias diana de ADN conocidas como sitios de reconocimiento.

El tramo de ADN entre sitios puede contener sitios de reconocimiento para otras recombinasas que responden a diferentes informaciones. Mover o eliminar estos sitios altera lo que sucederá con el ADN si una segunda o tercera recombinasa se activa más tarde. Por lo tanto, la historia de una célula se puede determinar por la secuenciación de su ADN.

En la versión más simple de este sistema, con sólo dos informaciones de entrada, hay cinco estados posibles para el circuito: estados que corresponden a ninguna entrada, a la entrada A solamente, a la entrada B solamente, A seguida de B, y B seguida por A. Los investigadores también diseñaron y construyeron circuitos que registran tres entradas, en las que son posibles 16 estados.

Bacterias

Para este estudio, los investigadores programaron células de bacterias E. coli para que respondieran a sustancias comúnmente usadas en los experimentos de laboratorio, entre ellas ATc (un análogo del antibiótico tetraciclina), un azúcar llamado arabinosa, y una sustancia química llamada DAPG.

Sin embargo, para aplicaciones médicas o ambientales, las recombinasas podrían ser re-diseñadas para responder a otras condiciones tales como la acidez o la presencia de factores específicos de transcripción (proteínas que controlan la expresión génica).

Después de crear circuitos que pudieran registrar los acontecimientos, los investigadores incorporaron luego genes en el conjunto de sitios de unión de las recombinasas, junto con elementos genéticos reguladores. En estos circuitos, cuando las recombinasas reorganizan el ADN, los circuitos no sólo registran información, sino que también controlan qué genes se activan o desactivan.

Los investigadores han probado este método con tres genes que codifican diferentes proteínas fluorescentes -verdes, rojas y azules-, construyendo un circuito que expresa una combinación diferente de las proteínas fluorescentes para cada identidad y orden de las dos entradas. Por ejemplo, cuando las células que llevaban este circuito recibían la entrada A seguida por la entrada B emitían fluorescencia roja y verde, mientras que las células que recibían B antes de A lo hacían en rojo y azul.

Aplicaciones

El laboratorio de Lu espera ahora utilizar este enfoque para estudiar procesos celulares que están controlados por una serie de eventos, tales como la aparición de citoquinas u otras moléculas de señalización, o la activación de ciertos genes.

«Esta idea de que podemos registrar y responder no sólo a combinaciones de acontecimientos biológicos, sino también al orden en que suceden, abre una gran cantidad de aplicaciones posibles. Mucho se sabe sobre qué factores regulan la diferenciación de tipos celulares específicos o dan lugar a la progresión de ciertas enfermedades, pero no se sabe mucho sobre la organización temporal de esos factores. Esa es una de las áreas que esperamos poder trabajar en con nuestro dispositivo», dice Roquet.

Por ejemplo, los científicos podrían utilizar esta técnica para seguir la trayectoria de las células madre u otras células inmaduras a medida que se transforman en células maduras diferenciadas. También podrían seguir la progresión de enfermedades como el cáncer. Un estudio reciente ha demostrado que el orden en que se adquieren mutaciones que causan cáncer puede determinar el comportamiento de la enfermedad. Por otra parte, los ingenieros podrían utilizar la plataforma de la máquina de estado desarrollada aquí para programar funciones y vías de diferenciación celulares.

Referencia bibliográfica:

Nathaniel Roquet, Ava P. Soleimany, Alyssa C. Ferris, Scott Aaronson, Timothy K. Lu: Synthetic recombinase-based state machines in living cells. Science (2016). DOI: 10.1126/science.aad8559.

RedacciónT21

Hacer un comentario

RSS Lo último de Tendencias21

  • En el caso de los caracoles, el huevo fue lo primero 14 abril, 2024
    Un caracol marino que primero fue ovíparo y evolucionó hacia la viviparidad revela que los saltos evolutivos ocurren gradualmente, a través de una serie de pequeños cambios.
    Redacción T21
  • Revelan el misterio del árbol tropical que camina 13 abril, 2024
    La denominada "palma caminante" o Socratea exorrhiza es un árbol de América Central y del Sur que según distintas versiones podría "caminar" y erguirse en determinadas situaciones: ahora, este mito parece haber sido resuelto bajo criterios científicos. Según los investigadores, aunque el árbol puede crecer rápidamente y crear nuevas raíces para lidiar con la pérdida […]
    Pablo Javier Piacente
  • Descubren 50 especies desconocidas para la ciencia en la exótica Isla de Pascua 12 abril, 2024
    Una expedición a la Cordillera de Salas y Gómez, frente a Rapa Nui, en el Océano Pacífico, documentó 160 especies animales que no se sabía que habitaban esta región de la misteriosa Isla de Pascua, en Chile. Además, descubrieron 50 criaturas que son absolutamente nuevas para la ciencia.
    Pablo Javier Piacente
  • El clima espacial podría generar un caos satelital sin precedentes 12 abril, 2024
    Los satélites en órbita terrestre baja (LEO) pueden perder su brújula cuando el clima espacial ofrece situaciones inesperadas. El problema afecta a la Estación Espacial Internacional, la estación espacial Tiangong de China y muchos satélites de observación de la Tierra. Los expertos sostienen que esta incertidumbre de posicionamiento aumenta el riesgo de colisiones orbitales peligrosas, […]
    Pablo Javier Piacente
  • La Inteligencia Artificial puede ser envenenada para proteger los derechos de autor 12 abril, 2024
    Una herramienta llamada Nightshade cambia imágenes digitales de manera casi imperceptible para el ojo humano, pero que se ven totalmente diferentes por los modelos de IA: una forma polémica de proteger las obras de arte de posibles infracciones de derechos de autor.
    Redacción T21
  • La acidez cerebral podría estar relacionada con múltiples trastornos neurológicos 11 abril, 2024
    Un estudio en animales a gran escala vincula los cambios en el pH del cerebro con problemas cognitivos de amplio alcance, ligados a patologías como el autismo o el Alzheimer, entre otras. Los científicos creen que los problemas metabólicos en el cerebro podrían estar directamente relacionados con una variedad de trastornos neuropsiquiátricos y neurodegenerativos.
    Pablo Javier Piacente
  • Cultivan organoides cerebrales con conexiones neuronales similares a las de un cerebro real 11 abril, 2024
    Un equipo internacional de investigadores ha desarrollado una técnica para conectar tejidos cultivados en laboratorio que imitan al cerebro humano de una manera que se asemeja a los circuitos neuronales del cerebro real. El "sistema" de mini cerebros interconectados podría revolucionar nuestra comprensión de las funciones cerebrales.
    Pablo Javier Piacente
  • Los Estados se exponen a condenas judiciales por inacción climática 11 abril, 2024
    Suiza es el primer Estado condenado judicialmente por no resolver el desafío climático y violar los derechos humanos de las personas mayores. Hace un año, 16 niños y jóvenes obtuvieron una sentencia condenatoria contra el Estado de Montana por destruir con sus leyes el medioambiente. Cualquier Estado puede ser denunciado si no preserva el ambiente en […]
    Eduardo Martínez de la Fe
  • Detectan extraños pulsos de radio procedentes de un magnetar que desconciertan a los científicos 10 abril, 2024
    Los astrónomos han detectado señales de radio inusuales procedentes de XTE J1810-197, un radiomagnetar o estrella de neutrones ultramagnética situada a 8.100 años luz de distancia de la Tierra, en la constelación de Sagitario. Los resultados son inesperados y sin precedentes: a diferencia de las señales de radio que se han detectado en otros magnetares, […]
    Pablo Javier Piacente
  • La IA podría ser el límite para todas las civilizaciones avanzadas en el Universo 10 abril, 2024
    Un nuevo estudio sugiere que el desarrollo de la Inteligencia Artificial (IA) hacia una Superinteligencia Artificial (ASI) podría explicar por qué no hemos detectado aún otras civilizaciones avanzadas en el cosmos, a pesar de la alta probabilidad de su existencia: en vez de supernovas, plagas, guerras nucleares o eventos climáticos extremos que hayan sido un […]
    Pablo Javier Piacente