Tendencias21
Los fiordos amenazan con peligrosos tsunamis

Los fiordos amenazan con peligrosos tsunamis

El hielo que sostiene las montañas que rodean a los fiordos se derrite por el calentamiento global: puede provocar deslizamientos de tierras y tsunamis en varias partes del mundo. La cuenta atrás ya ha empezado en Alaska.

Una nueva amenaza emerge de los gélidos fiordos distribuidos por las latitudes altas de los dos hemisferios terrestres: las montañas de estos valles tallados por la acción de los glaciares se están desmoronando por efecto del calentamiento global.

La capa de suelo permanentemente congelado (permafrost) que mantiene unidas a estas montañas está perdiendo masa helada, aumentado el riesgo de un gran deslizamiento de tierra que podría causar catastróficos tsunamis en diferentes partes del mundo.

Los fiordos, que por lo general son estrechos y se encuentran rodeados por empinadas montañas que nacen bajo el nivel del mar, están expuestos a esta potencial amenaza porque los glaciares que los han formado y sostienen sus montañas pierden cada año 335.000 millones de toneladas de hielo, según advirtió el año pasado la revista Nature.

Atención a Alaska

La evidencia más clara de este peligro está en torno al fiordo Barry Arm, situado en Prince William Sound, a unos 97 kilómetros al este de Anchorage, la ciudad más poblada de Alaska (USA).

El pasado mayo, un grupo de científicos alertó en una carta abierta al Departamento de Recursos Naturales de Alaska (ADNR) de este peligro, que calculan puede ocurrir, bien en 20 años, o bien en 12 meses.

Las temperaturas cada vez más cálidas están provocando la retirada del glaciar sobre el que descansa una pendiente de 1,6 kilómetros de uno de los flancos del fiordo, según estos científicos.

Aunque este deslizamiento se inició a principios del siglo XX y se aceleró hace diez años, su verdadera dimensión solo se descubrió este año tras analizar fotografías de satélite, haciendo saltar todas las alarmas.

En cualquier momento

En la actualidad, una tercera parte de esa pendiente está soportada por el glaciar: los científicos consideran que el eventual colapso de este soporte de hielo podría precipitarse en cualquier momento por un terremoto (Alaska se encuentra entre las áreas más propensas a terremotos del planeta).

También podría precipitarse por una fuerte lluvia o una ola de calor: en ambos casos, el agua aumenta la probabilidad de que la tierra sea arrastrada cuesta abajo por la gravedad.

En caso de que esto ocurra, un modelo informático calculó que caerían al mar alrededor de 500 millones de metros cúbicos de roca y tierra procedentes de la montaña, provocando un tsunami con olas de más de 100 metros de altura.

La doctora Chunli Dai, investigadora del Centro de Investigación Polar y Climática Byrd de la Universidad Estatal de Ohio, estima que todavía será peor: el colapso liberaría dieciséis veces más escombros y once veces más energía que el deslizamiento de tierra de Alaska ocurrido hace más de 60 años en la bahía de Lituya.

Antecedentes preocupantes

En 1958, un terremoto seguido de un deslizamiento de tierras en la bahía Lituya, al sureste de Alaska, provocó olas de 523 metros de altura, el tsunami más grande de todos los tiempos. Arrasó todos los árboles y la vegetación que encontró a su paso y desaparecieron considerables tramos de tierra próximos a la costa.

En 2015 ocurrió algo similar: colapsó una pendiente del fiordo de Taan en Alaska y generó un tsunami que arrasó bosques con olas de casi 200 metros de altura.

Los autores de la carta abierta, pertenecientes a 14 organizaciones e instituciones, incluidas la Universidad Estatal de Ohio, la Universidad del Sur de California y los campus de Anchorage y Fairbanks de la Universidad de Alaska, consideran que un deslizamiento similar puede ocurrir en cualquier momento en el fiordo Barry Arm debido a una serie de posibles desencadenantes imprevisibles.

La alerta científica ha intensificado el seguimiento de la evolución del hielo que contiene a la montaña amenazada, con la finalidad de anticipar posibles peligros y de adoptar medidas de salvaguardia para la población.

Estar preparados

Las autoridades de Alaska señalan al respecto que los análisis de la situación, realizados después de la alerta científica, no han apreciado movimientos significativos de las masas de tierra en la pendiente, a pesar de lo cual señalan la necesidad de estar preparados para un tsunami que afectaría a Prince William, así como a Valdez, Cordova, Tatitlek y Chenega.

El modelo informático desarrollado por los científicos, considera que el eventual colapso sería repentino y que se extendería con rapidez por todo el estrecho de Prince William y por diversas bahías y fiordos lejanos, desconociéndose se tendría un efecto multiplicador en otras regiones de Alaska.

Riesgo global

Analizando este proceso, la Universidad de Columbia advierte en su blog GlacierHub de la dimensión universal de la crisis del fiordo Barry Arm: es realmente algo aterrador, señala.

Añade que hasta ahora el riesgo de grandes tsunamis ha estado asociado a volcanes, como es el caso de la amenaza de Cumbre Vieja, en la isla canaria de La Palma, pero que ahora los científicos deben mirar con la misma preocupación a los glaciares de todo el mundo (la mayoría están en la Antártida) por el riesgo potencial que representan para amplias zonas del planeta.

Hasta ahora los científicos solo han comenzado a estudiar las conexiones entre el retroceso de los glaciares y los tsunamis provocados por deslizamientos de tierra en las últimas décadas. A la vista de lo que pasa en Alaska, temen un fuerte aumento de este tipo de peligro a medida que se retiran más y más glaciares.

Referencia

A recently discovered unstable slope in Barry Arm could lead to alandslide-generated tsunami. Alaska Department of Natural Resources (2020).

 

Foto: El escenario del posible deslizamiento en la montaña del fiordo Barry Arm de Alaska. Crédito: Valisa Higman, diciembre 2019. NASA.

 

 

RedacciónT21

Hacer un comentario

RSS Lo último de Tendencias21

  • Una extraña y antigua megaestructura acecha bajo el mar Báltico 20 abril, 2024
    En la bahía alemana de Mecklenburg, a 21 metros de profundidad, los científicos han encontrado una antigua megaestructura que data de la Edad de Piedra, concretamente de hace más de 10.000 años. La estructura, que abarca una longitud de casi un kilómetro y está compuesta por piedras de distintos tamaños, desafía toda explicación natural: los […]
    Pablo Javier Piacente
  • Descubren la primera evidencia de antigua vida humana en cuevas de lava 19 abril, 2024
    Los arqueólogos han descubierto la primera evidencia de que los humanos alguna vez ocuparon una cueva en Arabia Saudita formada por lava: hallaron diversos artefactos que confirman la actividad humana desde hace al menos 10.000 años hasta 3.500 años atrás, en esa red de cuevas de lava.
    Pablo Javier Piacente
  • Desarrollan un enjambre de cucarachas cyborgs controladas por IA para misiones peligrosas 19 abril, 2024
    Un equipo científico ha logrado crear un sistema robótico que permite manejar a distancia un pequeño ejército de cucarachas cyborgs, controladas a través de un algoritmo de Inteligencia Artificial (IA) para optimizar su navegación. Podrían ser de gran utilidad en operaciones de salvataje y gestión de desastres.
    Pablo Javier Piacente
  • La geometría del caos, ¿futuro de la arquitectura? 19 abril, 2024
    Las asimétricas celosías chinas de rayos de hielo, con una antigüedad de al menos 200 años, pueden inspirar la arquitectura actual porque proporcionan mayor estabilidad, resistencia y estética, que las estructuras simétricas. Además, sus patrones geométricos son los mismos que muestran nuestros huesos.
    Redacción T21
  • Los abrazos alivian la ansiedad y la depresión, según un nuevo estudio 18 abril, 2024
    Los abrazos y otras formas de contacto físico pueden ayudar con la salud mental en personas de todas las edades, según una nueva revisión de 212 estudios previos. Aunque esto ya estaba claro, los expertos aún no habían podido determinar qué tipo de contacto es el que genera más ventajas y por qué.
    Pablo Javier Piacente
  • Corrientes de estrellas y materia oscura diseñaron a la Vía Láctea 18 abril, 2024
    Restos de galaxias absorbidas por la Vía Láctea conforman corrientes estelares que la diseñaron a lo lardo de su historia. Algunas de esas fusiones podrían arrojar luz sobre el misterio de la materia oscura.
    Pablo Javier Piacente
  • Ya vivimos en un mundo de ciencia ficción 18 abril, 2024
    El Meta World Congress celebrado la semana pasada en Madrid ha dejado claro que los mundos virtuales y los videojuegos son el laboratorio de un Metaverso cada vez más inteligente y que la tecnología inmersiva cambiará el teatro y los conciertos. Un proceso de fusión de inteligencias llevará a la creatividad artificial a mezclarse con […]
    ALEJANDRO SACRISTÁN (enviado especial)
  • Descubren el pan más antiguo en Turquía: tiene 8.600 años 17 abril, 2024
    Un equipo de arqueólogos ha descubierto el pan más antiguo conocido en todo el mundo, que data del año 6600 a. C. Fue identificado en Çatalhöyük, un destacado asentamiento neolítico en Anatolia central, Turquía.
    Pablo Javier Piacente
  • Detectan un enorme agujero negro dormido en nuestra galaxia 17 abril, 2024
    El agujero negro de masa estelar más monstruoso de la Vía Láctea es un gigante dormido que acecha cerca de la Tierra, según un nuevo estudio. Con una masa casi 33 veces mayor que la del Sol, esta colosal estructura cósmica yace oculta a menos de 2.000 años luz de nuestro planeta, en la constelación […]
    Pablo Javier Piacente
  • Los pájaros reviven en sus sueños experiencias reales 17 abril, 2024
    Una investigación increíble ha descubierto que los pájaros a veces sueñan que están defendiendo su territorio frente a rivales, mostrándose con una cresta erizada de plumas y con un trino asociado al enfrentamiento.
    Redacción T21