Tendencias21

Los robots se infiltran en el mundo de los insectos para aprender de ellos

Introducir robots en comunidades de insectos es una gran forma de estudiar su comportamiento social. De momento se ha conseguido que sean capaces de infiltrarse e influir en las decisiones grupales, pero que lleguen a mimetizarse resulta mucho más difícil. Un grupo de investigadores franceses ha conseguido generar una conducta robótica de forma automática combinando las descripciones de los hábitos de las cucarachas con los modelos de movimiento, tanto individuales como en grupo. Por Patricia Pérez.

Los robots se infiltran en el mundo de los insectos para aprender de ellos

Los insectos son un modelo a seguir en el arte de trabajar en equipo, utilizando diferentes métodos para comunicarse basados en señales visuales, auditivas o químicas. Esto les permite procesar rápidamente cualquier tipo de información para mantener alerta al grupo, tomar decisiones correctas, comunicarlas y que sean acatadas por todos los miembros.

Ahora, una investigación trata de entender precisamente cómo los insectos y otros animales trabajan en equipo, para lo que están enviando a robots a realizar estudios de campo. Conocer con exactitud sus dinámicas de grupo ayudaría a extrapolar aquellas más factibles para mejorar la eficacia y eficiencia de las nuestras.

Así, según relata en un artículo la revista NewScientist, se han utilizado robots-abeja para estudiar la danza que éstas realizan a la entrada de la colmena para informar a todo el equipo sobre la localización de las mejores fuentes de néctar. El baile ayuda a decidir el número exacto de trabajadores necesario para recoger el néctar.

Otros androides están buscando la forma de infiltrarse en las colonias e influir en el comportamiento del grupo. En el caso de los robots-abejas podrían proteger a las abejas polinizadoras de los ácaros o alertarlas del mal tiempo liberando feromonas para evitar nueva incubaciones o salidas en busca de alimento.

Los robots pueden incluso utilizarse para animar a grupos de animales a hacer cosas que normalmente no harían. Por ejemplo, un robot-cucaracha puede engañar al grupo para exponerse a la luz, pese a que normalmente huirían de ella.

Imitación grupal

Sin embargo, diseñar un comportamiento robótico para que estos autómatas se mimeticen con el resto implica enfrentarse a un gran desafío: cómo pasar de la dinámica de decisión colectiva observada en los animales a una implementación algorítmica real en robots. En trabajos anteriores, el equipo liderado por José Halloy, de la Universidad Paris Diderot en Francia, programó en gran parte sus robots-cucarachas de forma manual, a menudo inspirándose en los modelos de diseño humanos. Pero se trata de una ardua tarea que no puede adaptarse fácilmente para su uso con otro tipo de animales.

Ahora, el giro en la investigación les ha permitido desarrollar una forma de generar el comportamiento de los robots de forma automática, combinando las descripciones de los hábitos de las cucarachas con los modelos de movimiento, tanto individuales como en grupo. A continuación, utiliza algoritmos evolutivos para optimizar los modelos. El resultado es un robot programado capturando el comportamiento global, no para que funcione como si fuera un insecto individual.

El equipo probó las conductas generadas en una simulación por ordenador en la que un grupo mixto de 45 cucarachas y cinco robots tenían que cooperar para elegir de forma colectiva entre dos refugios. La generación de conductas automáticas fue mucho más rápida que las hechas manualmente, dando lugar a comportamientos más realistas. En conjunto, detectaron que el grupo mixto actuó como un equipo de cucarachas real, agrupado en el hueco de la pared de forma realista.

Los investigadores creen que el estudio podría utilizarse para generar conductas imitadoras de otras especies, como las abejas, las moscas de la fruta, las aves o los peces. En todos estos casos prima el comportamiento y el movimiento sobre la apariencia, por lo que no sería necesario trabajar en el aspecto externo del robot. De hecho, estos animales no hacen distinciones físicas, por lo que no podrían ser detectados como extraños en el grupo.

“Un pez aceptará a un robot como otro pez si actúa como él, aunque no lo parezca”, subraya otro de los miembros del equipo, Nicolas Bredeche, de la Universidad Paris-Sorbona. Y en esta línea, el comportamiento a nivel grupal es aún más importante que las acciones individuales. Todo ello se podría utilizar para el modelado de comportamiento colectivo tanto en animales, como robots y sistemas bio-híbridos o biobots.

RedacciónT21

Hacer un comentario

RSS Lo último de Tendencias21

  • Japón lanza el primer satélite de madera al espacio 12 noviembre, 2024
    En el marco de una misión que tiene como objetivo primordial probar la hipótesis sobre la utilidad que podrían tener ciertos tipos de madera en la industria aeroespacial, investigadores japoneses lanzaron recientemente al espacio un pequeño satélite de madera. El equipo experimental fue transportado a la Estación Espacial Internacional (ISS) y se desplegará en órbita […]
    Pablo Javier Piacente
  • Los microplásticos pueden crear nubes y modificar el clima de la Tierra 12 noviembre, 2024
    Los microplásticos, directamente relacionados con los desechos industriales generados por la actividad humana y que están implicados en algunos de los problemas ambientales más graves que aquejan al planeta, también podrían producir nubes y modificar directamente el clima. Según un nuevo estudio, las partículas microplásticas pueden crear cristales de hielo a temperaturas de 5 a […]
    Pablo Javier Piacente
  • La memoria no solo reside en el cerebro, sino que está en todas las células del cuerpo 12 noviembre, 2024
    Un nuevo estudio ha descubierto que la memoria no es exclusiva del cerebro, sino que es una capacidad natural de todas las células que, por ejemplo, permite al páncreas recordar el patrón de nuestras comidas pesadas para mantener niveles saludables de glucosa en la sangre.
    Redacción T21
  • La IA podría producir hasta 5 millones de toneladas de residuos electrónicos en 10 años 11 noviembre, 2024
    La Inteligencia Artificial (IA) depende de mejoras tecnológicas rápidas, incluida la infraestructura de hardware y los chips. Las actualizaciones necesarias para seguir el ritmo del crecimiento de la tecnología podrían agravar los problemas existentes en cuanto a la acumulación de desechos electrónicos: al generar que los equipos se vuelvan obsoletos cada vez con mayor rapidez, […]
    Pablo Javier Piacente
  • Descubren cómo las neuronas controlan el cerebro 11 noviembre, 2024
    El cerebro es una maravilla de la eficiencia, que logra adaptarse y prosperar en un mundo que cambia rápidamente. A pesar de décadas de investigación, los científicos no han logrado revelar aún cómo el cerebro logra coordinar su actividad: ahora, un nuevo estudio ha descubierto la forma en que las neuronas, las células responsables de […]
    Pablo Javier Piacente
  • El ADN reescribe la historia de las víctimas de Pompeya 11 noviembre, 2024
    Algunos de los residentes que murieron juntos en la erupción volcánica del Vesubio en el año 79 d.C. no eran familiares biológicos, y otros que fueron percibidos como mujeres eran en realidad hombres. Los análisis de ADN también proporcionan nuevos conocimientos sobre la estructura de la población de Pompeya.
  • Una IA hace cambiar de opinión a los creyentes más fervorosos de las teorías de la conspiración 10 noviembre, 2024
    Los científicos han demostrado que la Inteligencia artificial (IA) podría ser una herramienta valiosa en la lucha contra las teorías de la conspiración, diseñando un chatbot que puede desacreditar la información falsa y lograr que las personas cuestionen sus pensamientos más arraigados, incluso en los casos de fanatismo más extremo. Desde Tendencias21, probamos directamente su […]
    Pablo Javier Piacente
  • La vida puede estirarse cambiando nuestra percepción del tiempo 9 noviembre, 2024
    Diferentes investigaciones descubren que la percepción del tiempo varía espontáneamente en el cerebro dependiendo de las experiencias y sugieren que en algún momento podríamos intervenir para ampliar la impresión de que el tiempo pasa más despacio.
    Eduardo Martínez de la Fe
  • Las misteriosas ráfagas rápidas de radio provendrían de regiones de formación de estrellas 8 noviembre, 2024
    Una nueva investigación ha determinado que las enigmáticas ráfagas rápidas de radio (FRB), señales que llegan desde el espacio sin una fuente fácilmente identificable y que muestran extraños ritmos y pulsos, tienen más probabilidades de provenir de galaxias con poblaciones estelares relativamente jóvenes. Llegarían desde galaxias formadoras de estrellas masivas y estarían relacionadas con los […]
    Pablo Javier Piacente
  • Los científicos discuten cómo frenar el deshielo del “glaciar del fin del mundo” 8 noviembre, 2024
    Diferentes trabajos y enfoques científicos intentan abordar cómo detener el deshielo del glaciar Thwaites en la Antártida: la pérdida de hielo cada año como consecuencia del cambio climático antropogénico amenaza la estabilidad de este gigante, que podría desatar un importante aumento en el nivel global de los mares, al propiciar el colapso de otras enormes […]
    Pablo Javier Piacente