Tendencias21
El destino no está escrito en los genes

El destino no está escrito en los genes

Un código oculto vinculado al ADN de las plantas permite desarrollar y transmitir nuevas características biológicas mucho más rápido de lo que hasta ahora se creía. Se trata del código ‘epigenético’ vegetal, que es mucho más flexible y que se podría extrapolar a los humanos, según recogen las conclusiones de un estudio pionero realizado por el Instituto Salk de Estudios Biológicos, en Estados Unidos. La investigación, liderada por el profesor de Biología Molecular y Celular, Joseph Ecker, demuestra que no toda la información de los seres vivos se encuentra en los genes. Por Maricar García.

El destino no está escrito en los genes

El estudio sobre un código oculto en el ADN, publicado por el Instituto Salk de Estudios Biológicos en un nota de prensa, proporciona la primera evidencia de que el código epigenético de los organismos (capa extra de instrucciones bioquímicas del ADN) puede evolucionar más rápido que el genético, y que puede influir fuertemente en los rasgos biológicos. En general, por epigenética se entiende el estudio de todos aquellos factores no genéticos que intervienen en la determinación del desarrollo de los organismos.

Si bien la investigación se ha limitado a una sola especie de planta llamada Arabidopsis thaliana, el equivalente a la rata de laboratorio del mundo vegetal, los resultados insinúan que los rasgos de otros organismos, incluidos los de los seres humanos, también podrían estar influenciados enormemente por mecanismos biológicos que los científicos están ahora empezando a comprender.

«Nuestro estudio demuestra que no todo está en los genes», ha señalado Joseph Ecker, profesor en Salk de Biología Molecular y Celular de laboratorio, y director del equipo de investigación. «Hemos encontrado que estas plantas tienen un código epigenético que es más flexible y más influyente de lo que imaginamos. Es evidente que hay un componente hereditario que no acabamos de entender. Es posible que los humanos tengamos un mecanismo epigenético igualmente activo que controle nuestras características biológicas y se pase a nuestros hijos», comenta Ecker.

Discrepancia entre genes y realidad

Con la llegada de las técnicas de medición del ADN de los organismos, los científicos han podido descubrir que los genes almacenados en el código del ADN no siempre determinan cómo se desarrolla un organismo ni cómo éste responde a su entorno. Los biólogos, tras estudiar los genomas de varios organismos (su código genético completo), están descubriendo las discrepancias entre lo que dicta el código genético y cómo llegan a funcionar los organismos en realidad.

De hecho, muchos de los grandes descubrimientos que llevaron a estas conclusiones se basaron en los estudios de las plantas. Hay rasgos como la forma de la flor y la pigmentación de los frutos que están bajo el control de este código epigenético. Dichos rasgos, que desafían las predicciones de la genética clásica, también se encuentran en los mamíferos. En algunas cepas de ratones, por ejemplo, una tendencia a la obesidad puede pasar de generación en generación, pero no hay diferencia entre el código genético de los ratones gordos y los ratones delgados que explique esta diferencia de peso.

El destino no está escrito en los genes

Los científicos han descubierto que, incluso los gemelos humanos idénticos, presentan diferentes características biológicas, a pesar de sus secuencias de ADN correspondientes. Por todo, ahora se tiene la hipótesis de que tales diferencias inexplicables podrían ser el fruto de las variaciones epigenéticas.

Ecker y otros científicos han trazado los misteriosos patrones de dichas variaciones, utilizando indicadores químicos a modo de «capas de control genético» colocadas en la parte superior de secuencias de ADN. De esta manera, han comprobado que, al igual que las mutaciones genéticas pueden surgir de manera espontánea y ser heredadas por las generaciones posteriores, las mutaciones epigenéticas pueden surgir en las personas y extenderse en la población.

Pero, aunque los científicos han identificado una serie de rasgos epigenéticos, se sabe muy poco acerca de la frecuencia con que ésta surge de forma espontánea, la rapidez con la que podría propagarse a través de una población y la importancia o influencia que podría tener sobre el desarrollo biológico y sus funciones.

Mayor influencia

«La percepción de la magnitud de las variaciones epigenéticas en las plantas de generación en generación varía mucho dentro de nuestra comunidad científica», ha apuntado Robert Schmitz, autor principal del artículo y de la investigación post-doctoral en el laboratorio de Eckers. «En realidad, se hizo el experimento, y se encontró que en general hay muy pocos cambios entre cada generación, aunque sí existen ‘epimutaciones’ espontáneas en las poblaciones, con una tasa mucho más elevada que la tasa de mutación del ADN, teniendo en ocasiones una influencia más fuerte que en la expresión de los genes», añade Schmitz.

En su estudio, los investigadores de Salk y sus colaboradores en el Instituto de Investigación Scripps realizaron un mapa del epigenoma de una población de plantas de Arabidopsis, en la que observaron cómo este paisaje bioquímico había cambiado después de 30 generaciones.

Este mapa consistió en el registro del estado de todos los lugares de la molécula de ADN que pudiera sufrir una modificación química conocida como metilación, un cambio de la epigenética clave que puede alterar la manera en la que ciertos genes subyacentes se expresan. Así, los cientifícos observaron cómo los estados de metilación de estos sitios habían evolucionado a lo largo de las generaciones.

Las plantas fueron todas clones de un mismo ejemplar, por lo que sus secuencias de ADN resultaron esencialmente idénticas a través de las generaciones. De esta manera, era probable que cualquier cambio en la forma de las plantas fuera el resultado de cambios espontáneos en su código epigenético -las variaciones en la metilación del ADN y no el resultado de las variaciones en las secuencias de ADN subyacente.

«A diferencia de las personas, algunas plantas son fáciles de clonar, por lo que podemos ver la firma epigenética sin todo el ruido genético», ha explicado Ecker. Los investigadores descubrieron que al menos uno de los sitios de metilación en el ADN de entre miles de plantas fue alterado en cada generación, lo que supone al menos que ésta se da aunque sea en una pequeña proporción.

Esto sugiere que el código epigenético de las plantas -y otros organismos, por extensión- es mucho más flexible que su código genético.

Conclusiones del estudio

Ecker ha señalado que los resultados del estudio ofrecen algunas de las primeras evidencias de que el código epigenético se puede escribir de forma rápida y tener unos efectos espectaculares. «Esto significa que los genes no son el destino», ha sentenciado. «Si ocurre como con estas plantas, nuestro epigenoma también puede sufrir cambios espontáneos relativamente rápidos, lo que podría tener una poderosa influencia sobre nuestros rasgos biológicos”, ha concluido.

Ahora que han demostrado hasta qué punto se producen las mutaciones espontáneas epigenéticas, los investigadores de Salk planean desentrañar los mecanismos bioquímicos que permiten que estos cambios surjan y pasen de una generación a otra.

También esperan explorar cómo diferentes condiciones ambientales, tales como las diferencias de temperatura, podría impulsar cambios epigenéticos en las plantas, o, por el contrario, si los rasgos epigenéticos dan a las plantas una mayor flexibilidad para hacer frente a los cambios ambientales. «No sabemos lo importante que son estos epimutaciones hasta que no se mida el efecto sobre las plantas, algo muy emocionante que acaba de comenzar a andar”, finaliza Joseph Ecker.

RedacciónT21

Hacer un comentario

RSS Lo último de Tendencias21

  • El asteroide "asesino de ciudades" se alejará en 2032, pero podría volver en cualquier momento, e incluso acompañado 26 marzo, 2025
    2024 YR4 se perderá en 2032 lejos de la Tierra, pero al acercarse será expulsado de su órbita y ya no volverá cada cuatro años. Sin embargo, a pesar de esta desviación su órbita aún cruzará la nuestra, pero no con tanta frecuencia. Podría volver en 2052, y será crucial seguir observándolo junto a otros […]
    Pablo Javier Piacente / T21
  • ¿Los perros están ocupando el lugar de los niños en las nuevas familias? 26 marzo, 2025
    En algunos países, el número de perros se ha incrementado tanto que ahora supera el número de niños. Aunque la importancia emocional de los perros, gatos y otras mascotas está aumentando claramente en todo el planeta y la natalidad humana desciende, los científicos están intentando determinar si las personas optan por mantener a los perros […]
    Pablo Javier Piacente / T21
  • La UE revoluciona la preparación ante emergencias: Kit de Supervivencia 2025 26 marzo, 2025
    La Unión Europea ha lanzado una revolucionaria estrategia científico-técnica de preparación ciudadana para 2025. El kit de supervivencia obligatorio no solo busca salvar vidas, sino transformar las respuestas ante las crisis. Descubre cómo esta iniciativa podría cambiar la resiliencia comunitaria y qué implica para el futuro de Europa.
    Redacción T21
  • Samsung Haean: Las gafas inteligentes que revolucionarán la realidad aumentada en 2025 26 marzo, 2025
    ¿Te imaginas llevar un par de gafas que traduzcan idiomas en tiempo real, te guíen por la ciudad y hasta te ayuden a realizar pagos? Samsung está a punto de hacerlo posible con Haean, un revolucionario dispositivo que podría llegar al mercado antes de finalizar 2025.
    Redacción T21
  • Las cámaras con IA podrían lograr que los vehículos autónomos se masifiquen 26 marzo, 2025
    Una nueva tecnología de cámaras impulsadas por Inteligencia Artificial (IA) permitirá a los vehículos sin conductor reaccionar más rápido que un velocista olímpico, ver en 3D y hacer que la conducción autónoma sea más segura y asequible.
    Redacción T21
  • Filtración en Signal: ¿Un error humano o una negligencia tecnológica? 26 marzo, 2025
    La reciente filtración de conversaciones en Signal en el seno de la administración Trump expone los riesgos de usar herramientas de consumo para gestionar información clasificada. Esta crisis pone el foco en los protocolos de seguridad, la gestión de datos y la Ley de Registros Federales.
    Redacción T21
  • Descubren una firme y alarmante relación entre las bebidas azucaradas y el cáncer 25 marzo, 2025
    Un nuevo estudio ha hallado un vínculo alarmante entre las bebidas azucaradas y el cáncer oral: los científicos de la Universidad de Washington descubrieron que las mujeres que beben al menos un refresco azucarado por día parecen tener aproximadamente cinco veces más probabilidades de contraer cáncer de cavidad oral (OCC) que las mujeres que evitan […]
    Pablo Javier Piacente / T21
  • Elon Musk y Neuralink ya están patentando una aplicación de "telepatía" 25 marzo, 2025
    En los últimos meses, Elon Musk y su equipo en Neuralink se han referido a las capacidades del chip de interfaz cerebral de la compañía, The Link, como “Telepatía”. Neuralink incluso ha presentado una solicitud de marca comercial ante los organismos oficiales estadounidenses para reservar los nombres “Telepatía” y “Telekinesis”. ¿Ya tiene Neuralink el secreto […]
    Pablo Javier Piacente / T21
  • Desarrollan la pantalla LED más pequeña del mundo: tiene el tamaño de un virus 25 marzo, 2025
    Investigadores de la Universidad de Zhejiang en Hangzhou, China, en colaboración con la Universidad de Cambridge, han creado una pantalla LED con píxeles que miden solo 90 nanómetros de ancho, un tamaño comparable al de los virus típicos. 
    Redacción T21
  • La revolución de la inteligencia artificial: ¿la era del fin del trabajo humano? 25 marzo, 2025
    La IA ha cruzado un umbral crítico: pronto podríamos ver sistemas autónomos capaces de realizar tareas humanas complejas, de semanas de duración, realizadas en apenas horas, cambiando para siempre el mercado laboral y la sociedad.
    Redacción T21