Marta Morales 
Los operadores móviles virtuales u OMV (conocidos en en inglés como Mobile Virtual Network Operator, MVNO) tienen ya más de 30 millones de abonados en Europa Occidental y han registrado un crecimiento de mercado del 60% en los dos últimos años, según una investigación que acaba de publicar IDATE, uno de los más prestigiosos centros de investigación europeos sobre el sector de las telecomunicaciones.
A partir de numerosos casos de estudio en Europa, Norteamérica y Asia, IDATE presenta un análisis estratégico completo de los escenarios de evolución de este modelo de negocio del sector de las telecomunicaciones, destacando las claves que representan estos operadores para la cadena de telefonía móvil.
Un operador móvil virtual es una compañía que no posee una concesión de espectro de frecuencia para ofrecer el servicio de telefonía móvil a través de una red propia, sino que revende servicios de telefonía móvil bajo su propia marca usando la red de otra operadora de servicio móvil.
El estudio determina que este mercado representa al 10% del conjunto de abonados a los servicios de telefonía móvil y señala que su crecimiento obedece al compás de espera que se ha implantado en los mercados móviles avanzados, así como al estímulo que están recibiendo los mercados en desarrollo dentro del sector.
Esta actividad puede ser mantenida asimismo por los reguladores, que ven en los operadores móviles virtuales una forma de intensificar la competencia en el sector. Los factores que van a determinar el crecimiento de esta rama de actividad son de naturaleza contextual, tecnológica y al mismo tiempo reguladora.
Claves del desarrollo
Por una parte, señala el estudio, el desarrollo de los operadores virtuales móviles participa de la necesidad de descanso que experimentan los mercados saturados o próximos a la saturación, como es el caso de Europa Occidental o Norteamérica, donde los mercados a conquistar son todavía importantes.
Por otro lado, el fenómeno MVNO se despliega en un entorno favorable que propicia su crecimiento, como es el de la convergencia de las redes, y merced a la adopción de servicios de valor añadido.
Por último, los operadores móviles virtuales se apoyan en la regulación del sector, que es uno de los factores que han permitido su lanzamiento. Los organismos reguladores se han apoyado en ellos para mediar entre operadores clásicos y ello explica la diversidad de desarrollo de los MVNO en los diferentes países de la Unión Europea.
En cualquier caso, señala IDATE, un nuevo paisaje móvil se perfila con los operadores generalistas, especialmente los MVNO, así como con los operadores especializados, que ocupan segmentos de clientes muy precisos pero que siguen dependiendo de los operadores generalistas para la prestación del servicio.
Los operadores móviles tienen en este contexto una doble estrategia: por un lado, los de bajo costo juegan la carta de los precios apostando por una rentabilidad frágil. Por otro lado, están los MVNO de nichos de mercado, que aspiran a captar clientes mal atendidos.
La verdadera cuestión es obtener unos ingresos medios por usuario de los abonados ya existentes, con ofertas muy a la medida de cada segmento de mercado, concluye el estudio de IDATE.
Incógnitas
El estudio no despeja la incógnita de si finalmente estos operadores virtuales van a permanecer definitivamente en el mercado de la telefonía móvil o quedarán limitados a una oferta de servicios básicos.
Después de analizar la situación de los MVNO en Alemania, Bélgica, Dinamarca, España, Francia, Italia y Reino Unido, así como en Estados Unidos y Canadá, descubre cuáles son las estrategias que estos operadores han desarrollado en cada uno de los países a partir del análisis de sus respectivas ofertas, políticas de precios, de comunicación y distribución.
Otros elementos analizados en el estudio son los comportamientos de los principales actores implicados en los países mencionados, particularmente las actitudes de los operadores integrados, origen de la presencia de los operadores móviles virtuales, y su origen empresarial, que es muy diverso: instituciones financieras que penetran en otros mercados, constructores de automóviles, compañías aéreas…
El estudio concluye con el diseño de posibles escenarios de evolución de estos operadores móviles y de su entorno, analizando especialmente la previsible evolución de los reglamentos, el impacto de los MVNO en la competencia del sector y qué puede pasar en las próximas décadas con la oferta de servicios móviles.
Contexto
En la práctica, la forma de proceder de los operadores móviles varía según el mercado. Por lo general, un MVNO no posee ninguna infraestructura de GSM o UMTS, ni un centro de conmutación de telefonía móvil (MSC) ni segmento radio en su red de acceso. Algunos pueden poseer su propio registro de localización (HLR), que permite más flexibilidad puesto que se pueden utilizar distintas redes de la misma operadora móvil o de varias operadoras
Según Ignacio Herreros, de Legallink, en toda Europa la figura de los OMV se ha ido extendiendo con la finalidad de crear mayor competitividad en el mercado de los servicios móviles, contrarrestando así la escasez de espectro radioeléctrico para este servicio, que impide la existencia de más operadores móviles tradicionales.
Así, en algunos países europeos, junto a los operadores móviles tradicionales, han aparecido otros como Virgin o Sainsbury’s que también prestan el servicio telefónico móvil utilizando la red de acceso de los primeros. Además, la figura de los OMV permitirá diversificar la prestación de servicios y contenidos una vez la 3ª generación de telefonía móvil (UMTS) esté implantada.
En España, la Orden CTE/601/2002 establece las condiciones aplicables a los OMV, las cuales deben adaptarse a la nueva Ley General de Telecomunicaciones. En la actualidad únicamente existen dos operadores habilitados para prestar el servicio de OMV (Tele2 y BT). Esto es debido a que ningún operador tradicional de telefonía móvil ha facilitado aún la interconexión a algún OMV con lo cual, aunque legalmente la figura de los OMV esté claramente definida, en la práctica no pueden prestar sus servicios.
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